El partido entre Platense y San Lorenzo tuvo de todo: tensión en el campo de juego, el atractivo de las dos hinchadas presentes en Vicente López y un marco caliente por lo que se jugaban ambos equipos. Pero, entre tanto fervor, hubo una presencia inesperada que captó todas las miradas: la de David Trezeguet.

El campeón del mundo con Francia en 1998, que también brilló en River y en la Juventus, se hizo un lugar en la platea para ver el partido. Su presencia no pasó inadvertida, sobre todo entre los hinchas calamares, que lo reconocieron como uno de los grandes futbolistas surgidos de la cantera del club.

Trezeguet debutó en la Primera de Platense en 1994 con apenas 16 años. Aquella aparición fue breve, ya que rápidamente emigró al Mónaco de Francia, donde comenzó una carrera internacional que lo llevó a conquistar títulos en Europa y a convertirse en una figura mundial. Sin embargo, el delantero nunca se olvidó de sus raíces y, cada vez que puede, vuelve al club que lo vio nacer como futbolista.

En esta oportunidad, aprovechó su estadía en el país para regresar al estadio Ciudad de Vicente López, el mismo en el que dio sus primeros pasos como profesional. Para la gente de Platense, fue una verdadera visita de lujo: no todos los días un campeón del mundo vuelve a la tribuna como un hincha más.

Más allá del resultado entre el “Calamar” y el “Ciclón”, la tarde quedará marcada por la imagen de Trezeguet en la platea, mezclado entre los hinchas, disfrutando del club que lo formó y que ahora vive uno de los momentos más importantes de su historia reciente.