Hay un color imposible de incorporar en el círculo cromático, un tono que no podremos encontrar en los acrílicos de librerías ni mucho menos percibirlo de la naturaleza. Solo al alterar unas señales láser y apuntar a una parte de la retina era posible percibir a "Olo", un color que solo cinco personas en el mundo lograron ver.

¿Cuál es tu color de la suerte, según tu fecha de nacimiento?

Los científicos  de la Universidad de California en Berkeley y la Universidad de Washington afirmaron haber descubierto un nuevo color llamado "Olo" que tiene un vínculo bastante estrecho con el "Mago de Oz". Se trata de un tono que ningún ojo humano vio antes y de hecho es más bien el producto de la tecnología y la estimulación láser.

Un láser alterado

"Olo" sería lo más parecido a un tono azul verdoso saturado, según describen los estudiosos. Para descubrirlo, se sometieron a pulsos láser en los ojos. Esta técnica del Sistema de Visión Oz, llamada así en homenaje a la Ciudad Esmeralda de la novela de L. Frank Baum "El Mago de Oz" (y la posterior película de 1939 protagonizada por Judy Garland), permite ver más allá de la gama normal de percepción del color.

Cuando las señales del láser Oz son "alteradas" sólo unas pocas micras, lo que es una millonésima parte de un metro, los sujetos pueden percibir el color natural del láser estimulante.

Una parte del ojo clave

Existen tres tipos de conos en el ojo: S (cortos), L (largos) y M (medianos), cada uno sensible a diferentes longitudes de onda de luz. Al estimular únicamente los conos M, los cinco participantes afirmaron haber observado un color azul verdoso que los científicos han llamado "olo", que representa el binario 010.

¿Cómo se ve "olo"?

El artículo publicado en Science Advances advertía: "Llamamos a este nuevo color 'olo'. Los participantes informaron que, en nuestro sistema prototipo, el olo aparece "azul verdoso con una saturación sin precedentes" al observarlo en relación con un fondo gris neutro. Los participantes descubrieron que deben desaturar el olo añadiendo luz blanca para lograr una coincidencia de color con la luz monocromática más cercana, que se encuentra en el límite de la gama, lo que demuestra inequívocamente que el olo se encuentra fuera de ella".

El coautor del estudio, el profesor Ren Ng de la Universidad de California, calificó los hallazgos como "asombrosos". “Predijimos desde el principio que se vería como una señal de color sin precedentes, pero no sabíamos qué haría el cerebro con ella”, dijo en un artículo de Euro News. “Fue asombroso. Está increíblemente saturado”, señaló.