Con una inflación en retroceso y un escenario económico más estable, las empresas argentinas están reformulando sus estrategias de compensación. Así lo revela el Reporte Salarial Julio 2025 de Randstad, que analiza las políticas salariales aplicadas al personal fuera de convenio durante el primer semestre del año.
El estudio muestra un cambio significativo en la dinámica de ajuste salarial: mientras en 2024 se proyectaba un incremento promedio del 49% para la primera mitad de 2025, el ajuste efectivamente realizado fue del 34,4%, lo que representa una diferencia de 14,6 puntos porcentuales. Este dato refleja no solo una desaceleración en los aumentos, sino también una transición hacia políticas más estratégicas, con foco en el rendimiento individual y los objetivos organizacionales.
Expectativas salariales para el segundo semestre
Las proyecciones para el resto del año consolidan esta tendencia. Para el tercer trimestre, se espera un ajuste promedio del 7,6%, y para el último trimestre, del 8,6%. Estos valores se alinean con las estimaciones de inflación del Informe REM del Banco Central, que prevé un 8,2% entre julio y diciembre. En ese contexto, los salarios fuera de convenio podrían lograr una leve mejora real en el poder adquisitivo.
“Estamos viendo un cambio en el enfoque de las empresas en materia de política salarial. Están dejando de correr por detrás de la inflación para adoptar esquemas más racionales y sostenibles”, explicó Andrea Ávila, CEO de Randstad para Argentina, Chile y Uruguay. “El rendimiento individual empieza a tener mayor peso en las decisiones de compensación”, agregó.
Desempeño, inflación y paritarias: los nuevos pilares de ajuste
El informe detalla que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) sigue siendo el principal indicador utilizado para definir los aumentos (82%), seguido por las paritarias (66%). No obstante, el desempeño individual ganó terreno: actualmente el 46% de las empresas lo considera al momento de definir ajustes salariales, frente al 34% registrado en 2024.
Respecto a la frecuencia de actualización salarial, el 46% de las organizaciones realiza ajustes trimestrales, el 21% lo hace bimestralmente y el 15% mensualmente. A pesar de la menor inflación, la revisión constante se mantiene como una práctica extendida.
Menor rotación y crecimiento de dotaciones
Un dato destacado del informe es la baja en los niveles de rotación de personal, que pasaron de un promedio del 8% en diciembre de 2024 al 5,9% en junio de 2025. Este descenso sugiere mayor estabilidad laboral y un alivio para los equipos de Recursos Humanos.
Además, el 60% de las empresas encuestadas aumentó su dotación en el primer semestre y proyecta un incremento adicional del 3,2% para la segunda mitad del año, lo que apunta a un escenario más optimista para el empleo formal.
“El aumento del costo de vida sigue presionando sobre las expectativas de los trabajadores, pero las empresas comienzan a utilizar herramientas más selectivas para fidelizar al talento, como bonos, comisiones y premios por desempeño”, concluyó Ávila.
Sobre el informe
El Reporte Salarial Julio 2025 se realizó entre mayo y junio a partir de una muestra de 298 empresas de todo el país, con el objetivo de analizar las tendencias en políticas de compensación, retención del talento y beneficios para el personal fuera de convenio.