El médico Salvador Plasencia, de 43 años, se declaró culpable este miércoles de cuatro cargos por distribución de ketamina sin un propósito médico legítimo, en el marco de la investigación por la muerte del actor Matthew Perry. Según informó la Fiscalía Federal de Estados Unidos, Plasencia entregará su licencia médica en los próximos 30 a 45 días y permanecerá en libertad bajo fianza hasta su sentencia, prevista para el 3 de diciembre.
Plasencia había aceptado un acuerdo de culpabilidad en junio, admitiendo que proporcionó ketamina al protagonista de Friends, quien falleció en octubre de 2023 a causa de una sobredosis. A cambio, los fiscales retiraron los cargos por falsificación de registros médicos y otros cargos adicionales por distribución de sustancias controladas.
Aunque enfrenta una pena máxima teórica de 40 años, se prevé que la sentencia será considerablemente menor, conforme a las pautas federales. Los fiscales aclararon que Plasencia no fue quien suministró la dosis fatal a Perry, pero sí señalaron que el médico intentó encubrir su implicación tras la muerte del actor. Entre otras evidencias, se presentó un mensaje de texto enviado a otro médico donde Plasencia se burlaba de su vínculo con el intérprete, diciendo: “Me pregunto cuánto pagará este imbécil… Averigüémoslo”.
El caso cuenta con otros acusados. Erik Fleming, Kenneth Iwamasa y Mark Chavez ya acordaron declararse culpables de conspiración para distribuir ketamina. La única imputada que irá a juicio es Jasveen Sangha, conocida como la “Reina de la Ketamina”, acusada de operar un escondite de distribución ilegal en North Hollywood. Su proceso judicial comenzará el mes próximo.
La causa continúa generando repercusiones en el ámbito médico y judicial estadounidense, revelando un entramado de prácticas irregulares en torno al uso de sustancias controladas con fines recreativos o sin supervisión médica adecuada.