Cada 27 de julio, la Iglesia Católica celebra a San Pantaleón, uno de los santos más populares entre los devotos que buscan sanación. Médico de profesión y mártir por la fe, es venerado en todo el mundo como protector de los enfermos.

¿Qué santo se celebra el 27 de julio?

El santoral católico del 27 de julio recuerda a San Pantaleón, un médico cristiano que vivió en el siglo III y fue martirizado durante las persecuciones del emperador Diocleciano. Su nombre proviene del griego “Panteleimon”, que significa “el que se compadece de todos”, en alusión a su vida dedicada a curar sin cobrar y ayudar a los más necesitados.

¿Quién fue San Pantaleón?

San Pantaleón nació en Nicomedia, en la actual Turquía. Fue educado como médico y, tras convertirse al cristianismo gracias a su madre y a un sacerdote llamado Hermolaos, comenzó a practicar la medicina de forma gratuita. Su fama como sanador creció, y su testimonio de fe lo llevó a ser perseguido y ejecutado por negarse a renunciar al cristianismo.

Se lo considera uno de los “Santos auxiliadores”, un grupo de catorce santos invocados especialmente en tiempos de necesidad o enfermedad. La tradición asegura que obró numerosos milagros tanto en vida como después de su muerte, lo que lo convirtió en patrono de los médicos y de los enfermos.

Devoción a San Pantaleón en Argentina

En Argentina, la devoción a San Pantaleón está muy arraigada. Cada 27 de julio, miles de fieles se acercan al santuario que lleva su nombre en el barrio de Mataderos, en la Ciudad de Buenos Aires, para agradecer o pedir por la salud propia o de sus seres queridos. También hay celebraciones en parroquias de todo el país.

Una costumbre popular es asistir a misa y recibir la bendición con el aceite de San Pantaleón, acompañado de estampitas y reliquias. Muchos fieles también suelen llevar consigo objetos o imágenes del santo durante el resto del año, como símbolo de protección.

Oración a San Pantaleón

“San Pantaleón, médico milagroso, intercede por nosotros ante Dios para que recobremos la salud del cuerpo y del alma. Te pedimos que cures nuestras dolencias y alivies nuestros sufrimientos. Amén.”