El fiscal federal Carlos Rívolo solicitó a la jueza María Eugenia Capuchetti que se realice una nueva pericia al teléfono celular del diputado nacional del PRO Gerardo Milman, en el marco de la causa que investiga el intento de asesinato contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, ocurrido el 1° de septiembre de 2022.

Rívolo consideró que el primer análisis forense realizado sobre el dispositivo “resulta a todas luces insuficiente”, y reclamó habilitar la feria judicial de julio para poder avanzar con un nuevo estudio. El planteo se sustenta en la necesidad de examinar de manera más detallada los registros del celular, especialmente los vinculados a comunicaciones a través de mensajería, redes sociales y correos electrónicos.

El fiscal explicó que en esta segunda pericia debería efectuarse un análisis manual, en lugar de depender exclusivamente de la búsqueda por palabras clave. “Con el objeto de examinar cada una de las comunicaciones y demás registros obtenidos mediante la extracción forense, en el período indicado por el Tribunal Superior, que hubiere mantenido el nombrado vía aplicaciones de mensajería, redes sociales y/o correos electrónicos, a los fines de verificar o descartar fehacientemente aquéllos extremos”, detalló.

En el primer estudio, los peritos buscaron términos específicos como “cuando la maten yo estoy camino a la costa”, “matar”, “maten”, “costa”, “Cristina”, “Kirchner”, “atentado”, “Brenda Uliarte”, “Sabag Montiel”, “Fernando”, “Carrizo”, “Juncal”, “Recoleta”, “magnicidio”, “asesinar”, entre otros.

No obstante, Rívolo cuestionó el método utilizado: “A mi criterio, el método escogido resulta a todas luces insuficiente para realizar esa tarea, por cuanto es innumerable el uso de vocablos que podrían utilizarse para referirse a los dichos que, según el testigo Jorge A. Abello, habría proferido el nombrado en el restaurante Casablanca”.

El testigo, Jorge Abello, declaró que escuchó a Milman pronunciar la frase “cuando la maten yo estoy camino a la Costa” en el restaurante Casablanca, dos días antes del atentado fallido contra la entonces vicepresidenta. Ante la “gravedad institucional de los eventos” investigados, Rívolo insistió en que se habilite la feria judicial para no demorar el avance de la causa.