El colapso de una losa de hormigón sobre el canal pluvial que corre paralelo a la avenida Roca, a la altura de la calle Ernesto Padilla (zona oeste de la capital), sigue sin ser reparado tras más de un año. Vecinos y comerciantes de la zona denunciaron a LA GACETA el estado de abandono de la obra, la falta total de señalización y el riesgo inminente para quienes transitan a pie por el lugar.
“No se puede pasar por acá sin arriesgarse a una caída. Hay personas mayores, chicos... ya se cayó una señora y se quebró las dos rodillas. Esto está así desde hace más de un año”, relató Daniel, vendedor ambulante.
El canal, con más de un metro y medio de profundidad, queda al descubierto tras el hundimiento de la losa. En días de lluvia, el agua rebalsa y cubre completamente el pozo, convirtiéndolo en una trampa invisible para los transeúntes. “No se distingue. Parece parte de la calle, y el agua llega hasta el borde. Si alguien cae ahí, no sale más”, contó Mónica, otra vecina del barrio 24 de Septiembre.
A pocos metros del lugar, una garita policial parece vigilar la escena, pero los residentes aseguran que no vieron presencia municipal ni tareas de evaluación estructural. “Si vienen, no vuelven más. Y esto sigue igual, con olores nauseabundos en verano y con todo el riesgo que implica”, agregó Mónica.
El concejal, Carlos Ale, presentó recientemente un pedido de informes al Ejecutivo municipal para exigir respuestas. “No hay ni señalización. El lugar debería estar mínimamente advertido con vallas o cintas. Estamos hablando de una avenida importante, a 15 minutos del centro de la ciudad”, expresó.
Los vecinos alertan además que otro tramo de la estructura, en la intersección con la calle Lincoln -frente a una estación de servicio-, también muestra signos de inestabilidad. “Eso se puede hundir en cualquier momento. Los autos y camiones pasan igual, no hay por dónde esquivar”, dijeron los vecinos.