COMPILACIÓN
MICROLEE
MÓNICA CAZÓN (Compiladora)
(Vleer - Tucumán)

Siete escritoras de microficción argentinas apoyaron el proyecto de lectura, investigación y estudio que les propuso Mónica Cazón, y emprendieron, con entusiasmo, la valiosa labor de hacer acercamientos críticos a algunas de las obras de microficción de autoras y autores del llamado género del tercer milenio.

Autores esenciales

Así, surgió Microlee. Laboratorio de lectura crítica de escritores de la microficción. A partir de los ensayos generados durante estos años, se integra este libro. El lugar de nacimiento y residencia de las autoras hacedoras de textos críticos es diverso: Ana María Mopty reside en el noroeste argentino, en Tucumán; Claudia Cortalezzi nació en Trenque Lauquen; Esther Andradi nació em Ataliva, Argentina, vivió un tiempo en Perú, en 1983 se estableció en Berlín y desde 2003 vive y escribe entre ambas capitales; Ildiko Nasrr es de Río Blanco, Jujuy;  Liliana Massara nació en Frías, Santiago del Estero y reside en Tucumán; Mónica Cazón es tucumana convicta y confesa; Nélida Cañas es originaria de Córdoba y ha vivido, trabajado y escrito en Jujuy; Patricia Nasello, originaria de Córdoba, lugar donde reside; Norah Scarpa Filsinger nació y vive en Tucumán.  

MicroLee contiene 36 ensayos de nueve escritoras de microficción, docentes, talleristas, promotoras del género de la brevedad, críticas literarias, estudiando con lucidez, versatilidad y talento a cuatro autoras y dos autores esenciales en el mapa de la minificción argentina de estos años.

El primer ensayo de este libro, de Ana María Mopty, titulado “Raúl Brasca: de textos con textos”, la escritora tucumana hace un brevísimo y lúcido recorrido por la valiosa labor de antólogo de Raúl Brasca, su generación de teoría y su escritura creativa. Fascina leer todo lo escrito en este ensayo, y no quiero dejar de (re)citar dos magníficas frases de Brasca: “El humor y el juego son los instrumentos de la lucidez” y “La mejor microficción es un relámpago en la noche, una luz repentina que muestra la fantasmagoría del paisaje sin que alcance a revelar del todo el misterio de lo oculto”.

Mónica Cazón escribe sobre la escritura minificcional de Esther Andradi. La autora el ensayo hace una lectura lúcida de La Donna é Mobile, intensa brevedad en la que Andradi relata en clave poética, con una enriquecedora intertextualidad, la violencia en contra de la mujer.

Si Mónica Cazón llamó a Esther Andradi “la peregina”, Cañas, con igual acierto, la bautiza como “escritora nómade” y hace un fulgurante recorrido por tres de los libros de la autora que sabe ser cosmopolita sin perder sus raíces en Buenos Aires. Cañas destaca el erotismo, el feminismo, la nostalgia por la infancia y la identidad hispanoamericana como ingredientes esenciales en algunas minificciones de Andradi.

Cierra este libro la tucumana Nora Scarpa Filsinger, con tres reveladores ensayos sobre tres autores. Si de la primera autora comenté el primer ensayo, de Scarpa Filsinger veré a vuelo de pájaro el último: un bello acercamiento a minificciones emblemáticas de la autora de e-Nanos, Caleidoscopio y Entre duendes y pirañas. Desde “Pierre” y su amalgama de ternura y su sorpresa final mezclada con desconcierto y horror hasta “Sísifo”, minificción en la que Nicastro es capaz de traer el mito a la vida cotidiana de las mujeres.

Para concluir, quiero expresar que este libro es la suma de una labor de crítica literaria, ejercida por escritoras de microficción, con la experiencia que les brinda su labor escritural y conocimiento íntimo y teórico del género. Labor de lectura y crítica entre pares. Escritoras estudiando con talento y generosidad a escritoras y escritores, que tejen juntas este tapiz multicolor, con una riqueza de registros lingüísticos en consonancia con la riqueza escritural de las minificciones estudiadas. Pase, lea y deléitese.

© LA GACETA

Dina Grijalva