Resulta que los viajes en el tiempo podrían ser una normalidad de nuestro día a día ya que nuestros ojos viven el tiempo mucho después que el resto de nuestro cuerpo. Esto lo demuestra un reciente estudio que determinó que nuestros ojos experimentan el mundo nada menos que 15 segundos en el pasado.
Cómo superar a tu ex, según un estudio científico: ¿cuánto tiempo se necesita?Para nuestros ojos es difícil percibir el mundo tal y como ocurre. Los científicos plantearon un pequeño experimento: abrí la aplicación de la cámara en tu teléfono y empezá a grabar un video. Colocá la pantalla frente a tus ojos e intenta usar la grabación en vivo como visor. ¿Complicado, verdad? Pues los estudios afirman que esta es la información desbordada que llega a nuestros ojos y con la que estos últimos bombardean nuestro cerebro, aunque este se la ingenia para acomodar el desorden manteniendo nuestra visión 15 segundos en el pasado.
La "ilusión de estabilidad visual"
“En lugar de analizar cada instantánea visual, percibimos en un momento dado un promedio de lo que vimos en los últimos 15 segundos”, señalan los investigadores de la Universidad de Aberdeen y la Universidad de California en un artículo de The Conversation. “Así, al agrupar objetos para que parezcan más similares, nuestro cerebro nos engaña haciéndonos percibir un entorno estable. Vivir en el pasado puede explicar por qué no percibimos los cambios sutiles que ocurren con el tiempo”, detallaron.
En su artículo revisado por pares publicado en 2022 en la revista Science Advances, los estudiosos describen una "ilusión de estabilidad visual" que nos ayuda a suavizar lo que vemos a lo largo del tiempo. Así no nos mareamos o sentimos náuseas al experimentar el mundo cotidiano.
Para esclarecer lo propuesto por los investigadores desde el medio Popular Mechanics ofrecen una explicación sencilla: Consideremos la capacidad de nuestros ojos para enfocar objetos a cierta distancia, manteniéndose estables al fijar la vista en los objetos que se encuentran en su trayectoria. Ahora, pensemos en lo que les sucede a nuestros ojos mientras están enfocados; deben moverse en todas direcciones para mantener esa sensación de fluidez al enfocar objetos lejanos, como un giroscopio que siempre permanece en posición vertical.
Suavizar el presente con el pasado
La razón de esta estabilidad visual es una teoría llamada "dependencia serial" que explica cómo nuestros ojos y cerebro trabajan juntos para suavizar lo que vemos a nuestro alrededor.
“La dependencia serial hace que los objetos en cualquier momento se perciban erróneamente como más similares a los del pasado reciente”, explican los investigadores. Esto significa que nuestro cerebro compara la imagen en vivo de nuestros ojos con imágenes del pasado muy reciente, encontrando erróneamente que ambas son iguales. Esto crea un efecto de suavizado al reducir el número total de fotogramas en juego al observar y percibir objetos.
El experimento que comprobó la teoría
Para comprobar esta teoría, los investigadores diseñaron un experimento en el que las personas observaban una imagen que cambiaba progresivamente y que mostraba un rostro transformándose de joven a viejo o de viejo a joven. Si nuestros cerebros se fijan en el pasado reciente, registrarán un desfase entre la edad que percibimos del rostro en la imagen cambiante y la edad real del rostro en la imagen.
Para comprobar con más detalle los detalles de la dependencia serial, los investigadores añadieron intervalos de tiempo crecientes en el centro de la imagen en movimiento, comenzando en un segundo y llegando hasta los 15 segundos, sin dejar de registrar la misma ilusoria desviación de la antigüedad de la imagen. Esto significa que nuestro cerebro es capaz de suavizar imágenes de hasta 15 segundos de antigüedad... o incluso más.