Todo vuelve. Y en el mundo de la moda y la belleza, eso es ley. Esta temporada, la sombra de ojos celeste se convierte en la protagonista indiscutible del maquillaje en España, rescatando el espíritu frosty de los años 2000 y dándole un giro sutil, elegante y contemporáneo. Lo que antes era brillo y exceso, hoy se transforma en sofisticación y equilibrio, sin perder un ápice de frescura.

De Twiggy a Euphoria: el viaje de un clásico pop

No es la primera vez que este tono conquista los párpados. En los años 60, la icónica Twiggy lo convirtió en sello personal con delineados marcados y pestañas dramáticas. Luego, en los 2000, la sombra celeste revivió en su versión helada (frosty) gracias a Britney Spears, Christina Aguilera, Beyoncé y las Spice Girls. El efecto: una mirada radiante que parecía esculpida por el hielo.

Sin embargo, fue entre 2022 y 2023 cuando el celeste volvió a colarse en los neceseres de maquillaje con fuerza, de la mano de series como Euphoria y personajes como Maddy (Alexa Demie) o Cassie (Sydney Sweeney). También lo lucieron figuras como Kendall Jenner —quien apostó por ella con un acabado empolvado de la mano de la maquilladora Mary Phillips— y la influencer Emma Chamberlain, que la llevó a la mismísima gala del Met.

Hoy, la sombra celeste se impone como una tendencia estrella del verano, perfecta para iluminar las noches con un aire fresco y nostálgico, pero con técnicas renovadas.

Así se lleva ahora: cinco formas de dominar la sombra celeste

1. Acabado empolvado (pero suave)

El brillo excesivo quedó atrás. Ahora el celeste se trabaja de forma difuminada, comenzando a ras de pestañas y extendiéndose suavemente hacia el exterior. Es una versión más pulida y minimalista, ideal para eventos o salidas nocturnas.

2. Degradado frosty

Para lograr una mirada abierta y luminosa, se recomienda aplicar sombra blanca en el lagrimal e ir difuminando con celeste hacia la cuenca. Un acabado elegante y moderno que prescinde del iluminador clásico.

3. Solo un toque

Para quienes prefieren un look más discreto, se puede aplicar un punto de luz celeste en la esquina interna del ojo, sin cubrir todo el párpado. Un extra: glitter o delineador brillante para un pop sutil.

4. Estilo Twiggy, con rímel y eyeliner

¿Más es más? Entonces, esta es tu opción. Recrear el look sesentero con sombra bien pigmentada, rímel alargador y delineado negro para una mirada de impacto.

5. Eyeliner celeste difuminado

Según el maquillador de Lancôme, Roberto Siguero, una manera sencilla de sumarse a la tendencia es usar un lápiz azul como delineado y difuminarlo con sombra celeste para un acabado casual y fresco. Ideal para el día a día.

¿A quién favorece esta tendencia?

Siguero lo deja claro: “Es una tendencia apta para cualquier mujer, especialmente para morenas de ojos marrones. El azul es su color complementario ideal”. Lejos del cliché que asocia el celeste a personas rubias, esta sombra demuestra su poder versátil y universal.

Además, el experto destaca que la clave está en la técnica: “Ahora se busca un ahumado difuminado que comience a ras de la pestaña y se pierda hacia arriba, sin estructurar tanto el ojo como se hacía en los 90”.

La sombra celeste se queda

En plena ola de regresos estéticos noventeros y Y2K, el celeste reivindica su lugar en la paleta actual: desde looks arriesgados y editoriales, hasta opciones delicadas y discretas para la oficina o un plan afterwork. Una mirada azul, fresca y rejuvenecedora, que deja atrás el exceso para transformarse en elegancia con personalidad.