Tras la renuncia de Manuel García-Mansilla, el Gobierno nacional decidió postergar el envío de nuevos pliegos para cubrir las vacantes en la Corte Suprema de Justicia hasta después de las elecciones. En la Casa Rosada no causó sorpresa la dimisión del jurista, cuyo nombramiento había sido rechazado por el Senado la semana pasada.

García Mansilla había sido designado por el presidente Javier Milei de manera provisoria, en comisión, durante el receso legislativo, en un contexto de falta de acuerdo con los bloques opositores. Su paso por el máximo tribunal duró apenas 39 días. Luego del rechazo parlamentario a su pliego y al del juez Ariel Lijo, las autoridades daban por descontado que su salida era inminente, pese a los esfuerzos del oficialismo por sostenerlo.

A pesar de las gestiones encabezadas por Santiago Caputo y el secretario de Justicia, Sebastián Amerio, el oficialismo no logró alcanzar los dos tercios necesarios en la Cámara alta para aprobar los nombramientos. Esto desató una controversia constitucional sobre la permanencia de García Mansilla en su cargo. Incluso se presentó un per saltum ante la Corte, impulsado por el procurador del Tesoro Santiago Castro Videla, solicitando que el tribunal analizara el caso.

Sin embargo, este lunes García-Mansilla presentó su renuncia “indeclinable” a través de una carta dirigida al Presidente, argumentando que su decisión respondía al rechazo explícito del Senado a su designación.

Pese al revés, en el entorno de Milei no hubo reacciones drásticas ni cambios en la agenda presidencial. El mandatario continuó con sus actividades y grabó un spot de campaña junto a su vocero, Manuel Adorni, quien encabeza la lista de candidatos de La Libertad Avanza para las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires. El video será difundido el próximo fin de semana, publicó Infobae.

Con la salida de García Mansilla, la Corte Suprema vuelve a contar con solo tres miembros: Horacio Rosatti, Ricardo Lorenzetti y Carlos Rosenkrantz. Esta situación se mantiene desde diciembre del año pasado, cuando se oficializó la vacante por la salida de Elena Highton de Nolasco.

Aunque desde el Gobierno reconocen su preocupación por el funcionamiento de un tribunal incompleto, la decisión es clara: no habrá nuevos pliegos hasta después de las elecciones. En Balcarce 50 consideran que, con la actual composición del Senado, cualquier nueva propuesta sería nuevamente bloqueada por la oposición.

La estrategia del oficialismo es esperar un mejor resultado electoral en los comicios legislativos de 2025. Confían en que una eventual expansión de sus bloques en ambas Cámaras facilitará la aprobación de futuros candidatos para completar el máximo tribunal.

Durante los primeros meses del año, cuando todavía se debatían las postulaciones de Lijo y García Mansilla, circularon otros nombres en el entorno presidencial: los jueces Ramírez Calvo y Ricardo Manuel Rojas. Este último, ex magistrado penal y cercano a Santiago Caputo, había sido considerado para la Procuración del Tesoro, aunque finalmente se eligió a Castro Videla para ese cargo.

Desde el Gobierno ya advirtieron que, si se repiten los rechazos, apuntarán a proponer "los jueces más libertarios" que encuentren. Por ahora, la estrategia está en pausa, a la espera de una nueva correlación de fuerzas en el Congreso.