En Rafaela, el inusualmente tranquilo miércoles -debido al feriado por los veteranos de Malvinas- se vio alterado por la presencia de hinchas de Atlético y de All Boys, que se trasladaron hasta la ciudad santafesina para ver el debut de sus respectivos equipos en la Copa Argentina. Pese a la rivalidad en la cancha, los simpatizantes se mostraron amigables en la previa.
En distintos puntos de la ciudad, principalmente en kioscos y en plena calle, hubo encuentros entre fanáticos de ambos equipos, claramente distinguibles por su vestimenta. Lejos de mostrar rivalidad, hubo buena onda, e intercambiaron charlas y risas.
Además de estar unidos por la pasión por el fútbol, "Decanos" y "Albos" compartieron la misma experiencia hoy: controles policiales muy rígidos en el camino hacia Rafaela.
Así como sucedió con los seis colectivos y vehículos particulares de hinchas de Atlético, los alrededor de 10 colectivos de fanáticos de All Boys también sufrieron a la policía en plena ruta. En ambos casos, estuvieron varias horas detenidos para ser requisados, y recién pudieron entrar a Rafaela un par de horas antes del partido.