El papa Francisco se comunicó telefónicamente este martes con Javier Milei, ganador del balotaje y futuro presidente de los argentinos.
El diálogo fue “muy bueno” y el mandatario electo ratificó la invitación para que el Pontífice visite la Argentina el próximo año “como jefe de Estado y líder de la Iglesia”, precisaron allegados al diputado libertario que el próximo 10 de diciembre asumirá en Casa Rosada. Durante todo el diálogo se dirigió al obispo de Roma como “su santidad”.
El contacto se habría gestado a través de un allegado a Ramiro Marra. Cuando Francisco llamó, Milei estaba grabando una entrevista televisiva que se transmitirá en las próximas horas.
Su futura canciller, Diana Mondino, lo buscó personalmente en el Hotel Libertador y le pidió que interrumpiera el reportaje para establecer el contacto con el Papa.
Milei -informó el medio Infobae- había empezado un trabajo fino para reencauzar la relación después de los cortocircuitos que se generaron durante la campaña.
Durante el debate presidencial previo a las elecciones generales, Sergio Massa acusó a Milei de ofender al jefe de la Iglesia con sus críticas. Por ese entonces, en un video que se viralizó en redes sociales se podía escuchar al flamante mandatario calificar al Pontífice como “el representante del maligno en la Tierra”.
El economista contestó que los cuestionamientos habían sido planteados cuando aún no había comenzado su carrera política. “Parece que estás poco informado, porque ya había pedido perdón por eso, y lo volvería a hacer, porque no tengo problema en eso, porque si me equivoco, no tengo problema en repetir que estoy arrepentido por eso”, contestó.
“Además, una de las cosas que dije es que si el Papa quería venir a la Argentina, se lo iba a respetar no solo como jefe de Estado, sino como líder de la Iglesia Católica, por lo tanto, dale, dejá de chicanear y dedicate a bajar la inflación y a terminar el gobierno de manera decorosa, dale”, agregó Milei.
Pese a ello, en el cierre de la campaña para la primera vuelta, el economista Alberto Benegas Lynch pidió suspender las relaciones diplomáticas con el Vaticano, circunstancia que volvió a elevar la tensión.