Ley Lucio: una norma para prevenir la violencia contra niños

Ley Lucio: una norma para prevenir la violencia contra niños

Aprobada por unanimidad en el Senado, incluye la capacitación a personal médico, policial y de organismos estatales para saber cómo determinar a tiempo estos casos.

LUCIO DUPUY. Tenía cuatro años cuando murió por el maltrato recibido.  LUCIO DUPUY. Tenía cuatro años cuando murió por el maltrato recibido.

La ley Lucio buscará prevenir los casos de violencia y de abusos en la crianza de niños, niñas y adolescentes. La norma incluye la capacitación a personal médico, policial y de organismos estatales pertinentes en el tema para saber cómo determinar a tiempo estos casos. Fue aprobada por unanimidad por el Senado.

El nombre de la ley surge del caso de Lucio Dupuy, el niño pampeano de cuatro años que murió por los maltratos que sufría por parte de su madre Magdalena Espósito Valenti y su pareja, Abigail Páez. La autopsia del pequeño demostraba que había sufrido fracturas, quemaduras y hasta lesiones en sus partes íntimas. Fuentes judiciales aseveran que Tucumán fue pionera en la implementación de muchos de los protocolos que esta nueva legislación extenderá a todas las provincias; sin embargo, aplicar estos protocolos requiere recursos y una permanente actividad entre los tres Poderes, por eso en nuestro distrito se registraron -al menos- dos casos similares al de Lucio en los últimos años.

Puntos de la ley

El principal objetivo es el de capacitar a los agentes del Estado que trabajen en relación a la niñez para que sean capaces de detectar las situaciones de violencia, abuso o abandono. Los talleres se intensificarán en la captación de conductas que brindan indicios de que el menor está inmerso en un entorno violento.

Otro punto de la ley prevé el anonimato de las denuncias. Esta iniciativa surgió a raíz de que algunos ciudadanos (vecinos, maestros, etc.) podrían conocer situaciones de esta índole, pero por temor no denuncian a los padres o tutores de un niño que está en peligro.

Finalmente, se ordena además que el Estado comience campañas de concientización en medios de comunicación y redes sociales para informar a la sociedad sobre los Derechos del Niño y sobre prevención. La norma tiene una finalidad similar a la Ley Micaela. Esta última busca prevenir las situaciones de violencia de género mediante campañas de concientización y capacitaciones al personal estatal interviniente.

Pioneros

“Una ley así siempre viene a sumar, sirve para visibilizar el problema y prevenirlo. Más allá de eso, entiendo que la Provincia viene trabajando con seriedad desde hace casi 10 años, cuando se establecieron los protocolos de protección integral de los derechos de los niños, niñas y Adolescentes (N.NyA). En materia penal, las estrategias de capacitaciones y de prevención se vienen haciendo, por lo que esta nueva ley pondrá una línea recta para que las provincias que no estén aplicando estas estrategias lo hagan. El trabajo en Niñez en la provincia se viene haciendo con mucha seriedad”, señaló la jueza de Niñez y Familia, Mariana Rey Galindo.

“Son muchos los riesgos que hay en el área y muchas veces no alcanza con el protocolo, se requiere de herramientas también y de presupuesto, por eso en estas situaciones un Poder depende del otro. Se necesita presupuesto para sostener la estructura: contratar profesionales, preparar lugares de contención para los niños, preparar equipos que trabajen dentro y fuera de la institución con el niño y su familia cercana y ampliada. Es necesario además que esta estructura tenga los medios para llegar a cada punto de la provincia y que tenga continuidad con trabajadores especializados y no precarizados”, explicó.

“Tucumán es pionera en varias de las cosas que implementará la ley Lucio. Resulta muy valorable el tema de las campañas para que la sociedad se involucre con la protección de estos derechos”, dijo el juez penal en Niñez y Adolescencia, Federico Moeykens, quien subrayó la importancia de un informe presentado en diciembre por la Oficina de Violencia Doméstica que advertía un crecimiento del 35% en esa problemática. “El 33% de los afectados son menores de 18 años y en su mayoría mujeres, sin embargo, cuando vemos a detalle, el 65% de las víctimas de entre 0 y 5 años son varones, es increíble cómo se invierte esto”, indicó. Luego comentó: “esto puede tener que ver también con el machismo, con una idea errada de que los varones pueden aguantar más ciertos maltratos”.

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