“Lo que es ilegal offline, también debe serlo online”

“Lo que es ilegal offline, también debe serlo online”

La semana pasada la Unión Europea (UE) dio un paso fundamental para concretar un esfuerzo que comenzó en 2020 y que todos creían casi imposible: crear una normativa para regular y controlar a las grandes plataformas tecnológicas como Google, Facebook, Amazon, entre otras. El Parlamento Europeo y el Consejo de la UE este viernes cerraron el acuerdo sobre la Directiva de Servicios Digitales y de esta forma, avanza la denominada Ley de Servicios Digitales, una norma que fue calificada de ambiciosa desde su inicio por el alcance sobre el que pretende regular. Se trata nada más y nada menos que poner límites a un grupo de empresas extranjeras -la mayoría son estadounidenses- y de las más poderosas del mundo. El motivo por el cual es interesante prestar atención a este proceso internacional es porque además será la primera norma que legitimará millonarias multas para las tecnológicas y será capaz de borrar contenido publicado en ellas. La propia Unión Europea calificó al proceso como “una primicia mundial en el campo de la regulación digital”, en el último comunicado de su Consejo.

“La Ley de servicios digitales se asegurará de que lo que es ilegal fuera de línea también se vea y se trate como ilegal en línea, no como un eslogan, como ¡la realidad! ¡Y siempre protegiendo la libertad de expresión!”, celebró este viernes Margrethe Vestager, la Vicepresidente Ejecutiva de la Comisión Europea para la Era Digital. De esta forma, la funcionaria no solo anunció el avance legal del proyecto sino también hizo hincapié en dos puntos centrales que en los próximos meses deberán cuidar los impulsores del proyecto: en primer lugar convencer de que el mismo marco legal que existe en el mundo analógico es aplicable al campo digital y que, en segundo término, las sanciones que se prevén de ninguna manera afectarán la libertad de expresión en las plataformas.

Por eso, y para sintetizar el proyecto, resumimos cinco puntos clave para entender cuál será la competencia que tendrá la Directiva de Servicios Digitales. 1) En primer lugar, el control se aplicará a todos los intermediarios en línea que presten servicios en la UE, pero para proteger a las empresas incipientes, el órgano tendrá competencia sobre plataformas tecnológicas que superen el 10% del mercado potencial europeo, es decir 45 millones de usuarios activos mensuales. 2) Se especificó además quiénes controlarán. El Consejo Europeo y su Parlamento le darán facultades exclusivas a la Directiva para supervisar a las plataformas “en línea muy grandes” y a los “motores de búsquedas muy grandes”. La supervisión se realizará en conjunto con los estados miembros de la UE. 3) El nuevo órgano de control deberá asegurarse de que las plataformas y los servicios digitales reduzcan los riesgos asociados a la difusión de contenidos ilegales, los efectos adversos sobre los derechos fundamentales, la manipulación de servicios con impacto en los procesos democráticos y la seguridad pública, los efectos adversos sobre la violencia de género, y sobre los menores y consecuencias, y los riesgos graves para la salud física o psíquica de los usuarios. Habrá además apartados específicos como la prohibición de instalar determinados programas por defecto en los celulares de cualquier compañía, controlar la publicidad ofrecida en las pantallas y el monopolio de las compañías. 4) El acuerdo alcanzado deberá ahora plasmarse en un texto legal que deberá ser ratificado nuevamente por el Consejo de la UE y el Parlamento Europeo. Se estima que en 15 meses ya estaría vigente. 5) El acuerdo prevé que las multas a las plataformas podrían llegar hasta el 6% de sus ingresos globales. Según Bloomberg, con la facturación de 2021, Amazon podría enfrentarse a una multa de 26.000 millones de euros y Google a una de 14.000 millones.

Resulta un poco inaudito cómo un proyecto de ley se encamina después de más de 20 años de existencia de estas plataformas. De hecho, el sábado pasado se cumplieron exactamente 17 años del primer video publicado en Youtube. Desde entonces, Google y Meta (ex Facebook) han transformado la manera en que nos relacionamos no solamente con la información sino entre nosotros. ¿Lo que es ilegal en el offline también tiene que serlo en el online? Es una pregunta que quizás podría impulsar el debate de este lado del Atlántico, donde por ahora solo seremos meros testigos de un proceso poco visibilizado. Sin embargo, podemos comenzar a tomar las riendas para reflexionar sobre estas preguntas y sobre las advertencias que giran alrededor de la normativa europea, principalmente vinculadas a la libertad de expresión y el poder de control de los Estados. Empecemos entonces, antes de que llegue un nuevo aniversario que nos sorprenda y nos siga dejando solos ante los gigantes de siempre.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios