30 Marzo 2022
Tránsito en Yerba Buena: "No es cuestión de controles sino de cultura vial"
Secuestraron 35 automóviles y 78 motos por infracciones en la última semana. Las autoridades dicen que no pueden poner un inspector por cada conductor. El proyecto de radares, detenido por los costos en dólares. Se vienen las fotomultas.
EN ROJO. Auto y camión pasan sin respetar la señal.
La tragedia se instaló en Yerba Buena el sábado en avenida Perón y Las Rosas. Pero para los vecinos se trata de una crónica anunciada: dicen que el común denominador es la falta general de respeto por las normas de tránsito. “Con semáforos o sin semáforos, los accidentes siguen ocurriendo, esto es así desde siempre. No se respeta nada”, dijo Gustavo Villagra, responsable de seguridad de un barrio privado ubicado por Las Rosas. “Debería haber controles más estroctos”, dice el vendedor ambulante Víctor Molina.
Sí hay esos controles. Según explican en la Dirección de Tránsito, se hacen inspecciones en todo lo que es las avenidas Aconquija y Perón. “Se trabaja realizando controles a las motocicletas, si los conductores llevan casco y tienen carnet, para evitar el exceso de velocidad. Somos el municipio que más controles realiza”, explica el director, Martín Aráoz.
“Estamos avanzando con el tema de las pintadas en los diferentes carriles de la avenida, con la determinación de las velocidades máximas. Se sigue trabajando con respecto al tema de las sanciones que se aplican sobre todo en tema de la alcoholemia, con test todos los días. Las personas que llegan con multas de estas características tienen la obligación de hacer un curso de seguridad vial. También se está accionando con la retención del carnet de manejo en los casos de excesiva velocidad y cruce de semáforos en rojo”, asevera.
NORMAS INCUMPLIDAS. Ciclistas que no respetan la luz roja se suman a autos en la línea peatonal y motociclistas sin casco. LA GACETA / FOTOs DE roberto delgado y de JOSé NUNO
Además indica que están secuestrando en un promedio que supera siempre las 70 motos por semana. “Hace siete días, cerramos con 35 automotores (entre autos y camionetas) y 78 motos. Nosotros tenemos un predio donde aguardan 90 días. Pasados esos días, si no hay reclamos, se notifica y se pasa a desguace a los vehículos. Hasta ahora, tenemos mayoría de motos”, manifiesta.
En el mismo sentido se pronuncia el secretario de Gobierno de Yerba Buena, Pablo Macchiarola. “Estamos haciendo tres controles por día; de hecho, el día del siniestro, hicimos controles como todos los fines de semana en dos puntos de la ciudad. Pero particularmente pienso que no es cuestión de más controles, sino de educación y de cultura vial. Porque es imposible poner un inspector de tránsito a la par de cada conductor. Entonces lo que hay que profundizar es la educación vial, el respeto por las normas. Lamento mucho lo sucedido, pero esto no solo ocurre en Yerba Buena, sino en todo el país”.
Lo sucedido el sábado fue tremendo. Una camioneta estaba detenida en el semáforo de Perón y Las Rosas y cuando estaba por girar fue embestida por una moto. Los dos motociclistas fallecieron.
SIN CASCO, Y EN ROJO. Cerca del lugar de la tragedia del sábado.
“Lo que más preocupa es el desapego de las personas a las normas. El Estado tiene en tema avanzar con la educación vial y con las sanciones. Pero siempre queda limitado a las personas que son legítimos usuarios de la vía pública, que tienen que contribuir con su cuota parte. Si secuestramos 78 motos por semana, que es un número grande para lo que es el municipio, la gente a la fecha sigue sin asumir las normas básicas de tránsito”, insiste Aráoz. Efectivamente, en cualquier momento en que se circule por la Perón se puede constatar que no se respetan las normas.
“Nos preocupa y nos ocupa. El intendente Mariano Campero va poniendo 10 complejos de semáforos en la ciudad y hemos aumentado en el 70% la cantidad de agentes de tránsito en las calles, lo que nos permite realizar los controles viales y de alcoholemia. Todo es para prevenir. Pero hay situaciones que pasan por la cultura vial de la persona. Lamentablemente, con lo que sucedió el sábado, según los testigos, hay una serie de cuestiones que están por fuera de la norma y que terminan en este desenlace”, sintetiza Macchiarola.
Proyectos a futuro
En febrero del año pasado, agentes municipales controlaban la velocidad en las arterias de más circulación del municipio con un sistema de radar manual. Tanto los vecinos como los conductores se mostraron a favor de esta iniciativa. Pero el proyecto todavía no se desarrolló en su totalidad.
“En este tema, ahora se está viendo los precios para adquirirlos y colocarlos fijos. Los radares -para que puedan tener cierta eficacia- tienen que estar homologados por la Agencia Nacional de Seguridad Vial, y no hay muchas empresas que trabajen con eso. En el medio de la pandemia, el proyecto tuvo un freno. Cuando hicimos la cotización tenían un valor y después, con el incremento del dólar, cambiaron los precios. Son instrumentos cotizados a valor dólar. Pero la idea es avanzar con la colocación de los radares fijos”, explica Aráoz.
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Lo que sí parece más viable, y que están en proceso de ser ubicados en la ciudad, son las cámaras de fotomulta que se conectan a centros de monitoreo. “Se están colocando y en breve van a estar funcionando. Es más rápido y tiene poco margen para el cuestionamiento por parte del conductor del vehículo cuando se le muestre la foto de la infracción. Es un sistema apropiado para evitar la suspicacia y tener la evidencia”, sintetiza Macchiarola.
Araóz explica que se sienten debajo de una doble vara moral frente a los ciudadanos. “Cuando una persona no cumple con las reglas básicas de tránsito es culpa del municipio, y si se hacen controles, nos dicen que estamos recaudando. Uno siempre está en la mira: lo serio es que se terminan perdiendo vidas humanas por la irresponsabilidad, la falta del deber cívico, la ausencia de apego a las reglas de tránsito”.(Producción periodística: Gianna Camarda).
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Inseguridad vial
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