Por Marcelo Androetto
04 Mayo 2021
DESDE EL PIZARRÓN. De Felippe da indicaciones durante el partido ante Independiente, el domingo pasado. El entrenador llegó a Atlético y puso a varios jóvenes en cancha. Comienzan a verse los frutos. FOTO DE MATIAS NAPOLI ESCALERO / ESPECIAL PARA LA GACETA
Se lo ve hablar con tanta pasión de sus “chicos”, que de no ser entrenador sería adecuado imaginarlo en un aula impartiendo clase como maestro o profesor.
En realidad, en su rol de director técnico, Omar De Felippe se las ingenia más que bien para integrar ambas pasiones, tal como lo demuestra el grupo de “changuitos” que promovió a Primera desde su desembarco en Atlético.
“Es muy lindo ver que un chico que hace muchos sacrificios para estar en un plantel pueda debutar, para ellos es algo inolvidable y para nosotros el primer paso”, señaló “ODF” en rueda de prensa, apenas sellada la trascendente victoria 1-0 sobre Independiente en Avellaneda
Un rato antes, un par de sueños se habían tornado realidad. Nicolás Romero tuvo su debut absoluto entrando desde el banco y Camilo Albornoz fue titular por primera vez. Hubo tres estrenos anteriores bajo la batuta de De Felippe: los de Nicolás Laméndola, Abel Bustos y Hernán Rosales. Y otros jóvenes siguen sumando minutos.
“Los pibes que juegan tienen que entender que es algo que hay que reforzar todos los días, para seguir creciendo y quedarse dentro del plantel. Trataremos de ayudarlos en ese aspecto y que el equipo siga siendo cada vez más competitivo, esa es nuestra tarea”, agregó el entrenador del “Decano”, quien se explayó largamente acerca de su filosofía como formador.
Ante la pregunta sobre si su idea al hacerse cargo del “Decano” era darle tanto espacio a los juveniles o esto se fue dando por imperio de las circunstancias, ODF respondió: “Siempre les manifiesto a los chicos cuál es el lugar que tienen en el plantel, titular, suplente, segundo suplente, a partir de ahí, el que está bien juega. Claro, se dan circunstancias que tienen que ver con el día a día, pero ningún entrenador del mundo deja de poner a un chico cuando juega bien. La edad es relativa, no apartamos en grupos a grandes y chicos, dentro de los 30 integrantes quien esté mejor juega. Así se crea una linda competencia…”
“Sabemos qué error puede cometer un chico. Como cuerpo técnico venimos de una formación de divisiones inferiores, no estamos acá porque siempre dirigimos a mayores; al contrario, arrancamos hace muchísimos años con pibes y ahora estamos en el fútbol profesional”, agregó.
El entrenador explicó cómo se maneja con los más jóvenes cuando las cosas no les van bien. “Uno no le promete la titularidad a nadie, es simplemente trabajo, rendimiento… trabajo, rendimiento, y si te toca entrar mal le decimos: ‘Vení, te cuidamos, te recuperamos para que vuelvas a estar en la fila y que vuelvas a jugar’. No hay muchos secretos en esto. A veces las cosas fáciles en el fútbol se hacen muy difíciles. Tratamos de que no sea así”.
A De Felippe le sienta bien el guardapolvo de maestro. En cambio, se aleja de la fisonomía de un contador. Tal vez por eso rechaza usar la calculadora de cara a la definición de la Copa de la Liga Profesional, prefiere no hablar de las posibilidades remotas de que Atlético clasifique a cuartos.
“Matemáticamente tenemos chances, pero se tienen que dar un montón de resultados, y cuando uno habla de clasificarse lo quiere hacer por lo propio y no estar esperando a ver qué hacen otros”.
“Se tienen que alinear los planetas y pasar muchas cosas. Lo más importante es sumar de a tres con Defensa, ocuparnos de eso y no estar haciendo cuentas o cosas raras”, aseguró, esta vez en rol de astrólogo.
Pequeña chance
Ayer, Gimnasia empató ante Sarmiento y ayudó a Atlético, que igual la tiene complicada. Debe ganar, esperar que pierda Unión y que no ganen el “Lobo” ni el “Rojo” ni Lanús.
Sin confirmación
AFA esperó hasta ayer para ver qué partidos de la fecha 13 tendrán clubes implicados para la clasificación. Atlético, uno de ellos, espera fecha y hora de su duelo con Defensa.
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