02 Mayo 2021
COMPOST. Es un proceso de fermentación de materia orgánica mediante la descomposición.
La mala gestión de residuos que realizamos en nuestra casa es uno de los factores que contribuye a la contaminación ambiental. Para contrarrestar el mal causado, son muchas las familias que se suman al compostaje urbano.
“Al compostar, los microorganismos presentes en la basura degradan la materia orgánica hasta formar abono. El beneficio es que esa tierra contiene muchos nutrientes que mejoran las huertas o sirven de fertilizante para las plantas”, detalla Alejandro Natan, miembro de “Compostaje con-ciencia”, una ONG argentina que brinda charlas sobre desarrollo sostenible.
Para arrancar, basta con tener a mano dos recipientes. Uno grande (con agujeros en la base y la tapa) para colocar al aire libre y otro más pequeño. “Este espacio debe ser húmedo y contar con una buena circulación de oxígeno. Cuando cocinemos los restos irán a parar ahí. A medida que se llene, solo hay que mezclarlos una o dos veces por semana y chequear que el drenaje de agua (la zona de los agujeros) funcione”, explica Natan.
Sirven para el compost los restos de pan, huevos, café, té, yerba mate, arroz, pastas y cualquier fruta o verdura.
Una vez que el envase se llene, los residuos deben pasar al recipiente más grande. “El último paso para obtener compost es colocar en la base y luego de cada capa de residuos un parte de tierra para que los insectos y microorganismos hagan su trabajo. La regla es intercalar una capa de basura húmeda con otra de basura seca (como hojas de plantas, cartón, papel y virutas)”, especifica el ambientalista.
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