Quiénes ganan y quiénes pierden en la distribución del gasto provincial 2021

Un nivel de gastos de $ 215.000 millones. Esa es la pauta que el Poder Ejecutivo ha presupuestado para el año electoral. A simple vista, el proyecto girado a la Legislatura contempla que bajará el gasto corriente y subirá considerablemente el gasto de capital y por ende la obra publica, pero a costas de un déficit importante. Con el ajuste en las erogaciones corrientes lo mejor sería buscar el equilibrio presupuestario, y no generan un déficit basado en un plan de obras públicas que terminará indefectiblemente en un incremento de la deuda pública, plantea el economista Clemente Babot, en el reciente informe presentado por la Fundación Federalismo y Libertad sobre el Presupuesto provincial 2021.

Uno de los pilares fundamentales de la democracia es la transparencia en la gestión pública. "Los ciudadanos deben estar informados sobre la labor del Estado y la forma en que se utilizan los recursos públicos. Sin embargo, en la realidad los dirigentes políticos son reacios al momento de rendir cuentas del uso que se da al dinero de los contribuyentes. El proyecto de ley de presupuesto es un ejemplo claro de esta situación", remarca el reporte al que accedió LA GACETA. En primer lugar, detalla Babot, la información no es publicada en los portales del poder ejecutivo ni del poder legislativo que tiene la tarea de controlarlo, tratarlo y aprobarlo. En segundo lugar, las partidas de gastos son muy generales, con cuentas sin detalle de miles de millones de pesos. Como ejemplo basta saber que el presupuesto de poder legislativo no esta desagregado en el proyecto de ley. Con esto, el paso por la legislatura se ha convertido en una formalidad burocrática más que el control real que exige el ejercicio democrático de pesos y contrapesos. Por último, la información disponible no es clara y se debe ser un experto para poder desentrañarla e interpretarla.

Para realizar una comparación homogénea se puede actualizar el presupuesto vigente por el índice de precios al consumidor anualizado de octubre publicado por el Indec. El cambio principal se da en el gasto en educación, con una caída del 15%, que baja su participación porcentual sobre el total desde el 23% en 2020, al 19% en 2021, indica el diagnóstico. Son casi $ 7.000 millones menos en moneda constante. Los fondos destinados a transferencias a Municipios y Comunas también muestran fondos que son un 12% menores que el presupuesto 2020. El mismo camino sigue los fondos destinados al subsidio al transporte, pero con una baja del 22%. Para salud, el presupuesto es similar a 2020. El ítem de mayor crecimiento se da en el Ministerio de Economía, donde se encuentran las reparticiones a las que se asigna los presupuestos de la obra publica.

Según el análisis, los gastos corrientes bajaron su participación entre el presupuesto 2020 y el actual proyecto, pasando del 95% al 89% del total. En moneda constante implica una baja del 6%, unos $ 12.000 millones de pesos de 2020. Los dos rubros mas importantes son el gasto personal con el 61% y las transferencias con el 30%. La asignación a bienes de uso es apenas un 4%. Evidentemente, el mayor gasto se destinará al personal y muy poco se destina a la compra de bienes de uso, insumos fundamentales para la operación eficiente del estado. "Para ver más claramente este dato, restamos de los gastos corrientes las transferencias, entonces los gastos en personal son el 87%. Con los gastos corrientes el estado básicamente paga sueldos", explica el economista.

¿Cómo será el comportamiento del gasto en las principales áreas del Estado provincial? Aquí una explicación sector por sector

- Educación ($ 41.800 millones para 2021). El crecimiento del presupuesto alcanza sólo el 17% en términos nominales, pero considerando el crecimiento de la inflación del 37,2% en realidad se está realizando un ajuste en términos reales. El 87% de los recursos destinados a educación constituyen gasto en personal, pero si se restaran las transferencias este porcentaje aumenta al 97%. Así prácticamente todo el presupuesto en educación de la provincia se destina a sueldos.

- Salud ($ 34.100 millones). Se mantiene la participación y el monto en términos reales. En el caso del gasto en personal, sube menos que la inflación, por lo que se registra una baja en términos reales del 5%. Donde crece un 31% es el monto que se aplica a bienes de uso. La participación de los sueldos pasará del 69% al 65%. Como en los puntos anteriores el rubro transferencias crece en forma importante, para 2021 las pensiones no contributivas dentro del presupuesto de salud ascienden a $ 1.100 millones.

- Seguridad ($ 19.700 millones). Subió su participación en el total del 8% al 9% y en términos reales sumó $2.800 millones, un 17%. El incremento se da principalmente en gasto en personal y en transferencias. En el rubro transferencias, neto de subsidio al transporte, se encuentra un monto por $2.100 millones destinado al Ministerio de Seguridad, sin mas detalle de su destino especifico. Es el rubro que mas creció, multiplicando por nueve el monto del año anterior. La participación de los montos destinados a bienes de uso y consumo son mínimos con un 3% del total para 2021. Existe un rubro denominado reequipamiento por unos $ 20 millones, un 0,1% del presupuesto de seguridad.

- Obras públicas. Las propuestas de inversión en obra pública suman un total cercano a los $ 20.000 millones, con muy poca información sobre el detalle de cada obra y la prioridad de su ejecución. Las obras de encauces de ríos, defensas y canales se llevan un 43% del total, unos $ 8.530 millones. La mitad de este monto se destina a “Encauce y protección de márgenes Rio Salí - Tramo Puente Barros”, el resto en Canal Yerba Buena, Encauce Rio Gastona y muchas obras más. El Instituto Provincial de la Vivienda tendrá un presupuesto de casi $ 3.400 millones distribuido en cientos de obras por toda la provincia. Otros $ 3.200 millones serán destinados a la Dirección Provincial de Vialidad para mejorar las rutas de la provincia.

Como conclusión, el informe privado destaca que para 2021 se presentó un proyecto de presupuesto con déficit, con un incremento importante en la deuda y con muchas partidas de transferencias y erogaciones muy generales. El presupuesto total de gastos se actualiza con la inflación, sin bajar un peso respecto al año pasado. "Para evitar el déficit las soluciones implican postergar obra publica o bajar solo un 5% el gasto en general, valor insignificante comparado con el sacrificio que esta asumiendo el sector privado. Se debería esperar una baja aún mayor de los gastos de gobierno, que implique una disminución en la agobiante presión fiscal sobre los contribuyentes", finaliza.