Pese al desastre, trabajan para que la Feria de Simoca abra sus puertas

Pese al desastre, trabajan para que la Feria de Simoca abra sus puertas

Feriantes se unieron para que el tradicional paseo reciba mañana a los visitantes.

A TODO RITMO. Tres operarios trabajan limpiando la caminería. A TODO RITMO. Tres operarios trabajan limpiando la caminería.

Golpeados por el vandalismo, pero dispuestos a no resignar el trabajo. A impedir el desplome de  un sitio que simboliza la tradición, la economía y el esfuerzo del pueblo. Es la actitud que asumieron los cientos de damnificados por el incendio que destruyó el martes pasado casi la mitad de la feria de Simoca. Este tradicional atractivo comercial,  de distracción y turístico que tiene la comunidad, no se suspenderá este sábado a pesar de que las llamas redujeron a cenizas 97 ranchos.

Todo lo contrario. La feria se realizará con un impulso renovado. Volverán a funcionar reubicados todos los puestos de ventas y habrá música con grupos folclóricos que contribuirán a espantar el desánimo y abrirle las puertas a la alegría. “Vamos a mostrar al país que seguimos de pie. Que más allá de la pérdida material, los que les damos vida a la feria somos nosotros, los puesteros”, dijo envalentonada Elizabeth Ortiz.

La joven es una de las vendedoras que, impotente, vio cómo el fuego redujo a escombros humeantes su rancho con freezer, sillas y mesas. “Uno vive de esto y lo peor que puede hacer es dejarse ganar por la bronca y la impotencia. Con esfuerzo vamos a salir adelante”, señaló, por su parte, María Correa.

Sin tregua

El  duro impacto que acusó la comunidad tras lo ocurrido en el día mismo de la festividad de la virgen Nuestra Señora de La Merced, patrona del lugar, fue patético. Pero rápidamente llegó la reacción. Un centenar de obreros municipales trabaja contrarreloj para reconstruir una veintena de asadores y hacer otros acondicionamientos en el sector sur, el que lleva el nombre de la cantante Mercedes Sosa. Ahí, en donde se desarrolla todos los años la Fiesta Nacional de la Feria, serán reubicados los damnificados por el siniestro, entre vendedores de comidas y otros dedicados al expendio de chacinados, verduras, pan casero, rosquetes, pasteles y artesanías.

La decisión de dar batalla a la adversidad emergió durante la reunión que mantuvo el miércoles por la tarde el intendente Marcelo Herrera con los feriantes que perdieron sus ranchos. Momentos antes el vicegobernador, Osvaldo Jaldo, había estado en el lugar y se había comprometido a brindar el apoyo de la Legislatura y del Gobierno de la provincia para sacar adelante a la feria.

“Nadie está dispuesto a bajar los brazos, pese a que el impacto fue muy fuerte. Aquí se destruyeron cuatro años de trabajo incansable, que había cambiado el relieve del lugar. Las obras nos habían posicionado notablemente entre los sitios más tradicionales del país” , apuntó el subsecretario de Gobierno de la Intendencia, Daniel Paz.

“A los puesteros la Intendencia les había entregado freezers, heladeras, freidoras y otras herramientas de trabajo que se perdieron. De ahí también la bronca de la gente”, añadió. “No podemos seguir lamentándonos por lo sucedido. Ahora hay que volver a empezar. Y frente a la decisión de seguir adelante, esperamos el acompañamiento de los tucumanos. Este sábado seguramente van a colmar el predio ferial”, explicó.

El intendente Herrera y la provincia estudian la reconstrucción de los ranchos, aunque aún no tienen decidido si se volverá a utilizar paja y quebracho en la obra. También se prevé abordar el tema de la falta de seguridad.

Detenidos, con antecedentes de incendiarios

El comisario principal Gustavo Gómez aseguró que los dos jóvenes detenidos acusados de generar el incendio en la feria  tienen antecedentes por robos  e intentar quemar el camión de un lugareño.

“Hay pruebas concretas que incriminan a Agustín Mendoza (22 años) y a José Cancino (21). Los elementos reunidos están a disposición de la justicia que ya dispuso la detención de ambos”, sostuvo en una entrevista con LA GACETA.

“El incendio fue catastrófico principalmente porque a la hora en que se inició corría un viento bastante fuerte. En el sitio había dos custodias, pero la feria es muy amplia y no alcanzan a resguardar el sitio como corresponde”, agregó el comisario.

Los parientes de los acusados, del barrio 9 de Julio,  admitieron los problemas de adicción que sufren y los frecuentes dolores de cabeza que les causa sus inconductas.

Sin embargo dijeron que esperan que la justicia investigue a fondo lo ocurrido a fin de que no hayan dudas de quienes fueron los autores del siniestro.

“No podemos negar los problemas de los muchachos, pero tampoco estamos en condiciones de asegurar si participaron en ese hecho”, explicó una tía de Mendoza.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios