25 Diciembre 2018
Los militantes del espacio Radicales en Acción Agustín Barrera y Gabriel Morcos denunciaron que la Policía los demoró el sábado, mientras pegaban afiches, porque las consignas iban en contra del gobernador, Juan Manzur. Según ellos, se trató de una clara intimidación política.
Los jóvenes relataron la persecución policial que sufrieron el sábado a la madrugada cuando pegaban carteles con críticas a la política oficial en materia de seguridad. Fueron acompañados por la senadora Silvias Elías de Pérez y el legislador José María Canelada, quienes advirtieron que no permitirán que el Gobierno "vuelva a pisotear el derecho de expresión".
"En Balcarce y Córdoba nos interceptaron los policías y nos dijeron que no podíamos pegar carteles. Les preguntamos por qué, si Tucumán estaba lleno de afiches en todas las paredes y nos respondieron que lo que estaba mal era que iban en contra del gobernador. Luego dijeron que tenían bajada de línea de su jefe, el ministro (Claudio) Maley, de que no lo podían permitir. Después nos revisaron todo el auto y nos llevaron a la comisaría, donde estuvimos dos horas y media sin poder comunicarnos con nuestros familiares. Hubo malos tratos, nos decían que no podíamos usar los celulares y nos quitaron los carteles y el pegamento. Nunca nos había pasado algo así", relató Barrera, quien recuperó la libertad junto a otros tres militantes alrededor de las 5 de la madrugada.
Este no fue el único episodio violento que vivieron militantes de ese grupo durante esa madrugada, según precisaron. "Cuando estábamos en 24 de Septiembre y Buenos Aires, se acercaron dos policías y nos dijeron que no podíamos pegar carteles pero no nos supieron decir por qué. De mala manera nos los quitaron y los rompieron. Cuando nos subimos al auto comenzaron a sacarle fotos a la patente y luego nos persiguieron durante cinco cuadras. Hubo violencia verbal y a los chicos los manotearon para sacarles los carteles", relató Morcos.
Apoyo y repudio
Elías de Pérez afirmó que toda esta situación le recordó a las manifestaciones de 2015 que fueron reprimidas por la Policía.
"Cuando entramos a Casa de Gobierno había cuatro jóvenes muertos de miedo, golpeados por la Policía. En ese momento, la consigna era que no volvieran a la Plaza a seguir criticando al Gobierno, como pasó ahora. Le queremos decir al gobernador Manzur que estos jóvenes militantes no están solos, que estamos con ellos, y que no vamos a permitir que se vuelva a pisotear la libertad de expresión en Tucumán. Ellos se expresaron porque en Tucumán nos están matando. Salieron porque hace una semana les asesinaron a un compañero de la facultad, Marcos Sáez. En estas fiestas más de 100 jóvenes no estarán con sus familias porque fueron asesinados. Manzur miente", aseveró.
Por su parte, Canelada señaló que la detención de los militantes no era casualidad, que había sido pocas horas después de la sesión donde había advertido que denunciarían a Manzur por la compra de armas a Israel. "A media cuadra de la comisaría Primera asaltan un drusgtore y nadie ve nada, pero estos jóvenes salen a pegar afiches y se pone en movimiento todo el aparato estatal para detenerlos y reprimirlos. Las disculpas del jefe de Policía a través de los medios no nos alcanzan. Queremos que Manzur se haga responsable de lo que pasó, que garantice que todos los tucumanos se puedan expresar y que garantice la seguridad en esta provincia".
Tras la polémica que había generado el suceso, el jefe de Policía, comisario general (r) José Díaz, tuvo que salir el sábado a pedir disculpas públicas. “Como jefe de la fuerza, pido disculpas a los jóvenes que fueron trasladados a la comisaría. No hay orden expresa o directivas que impidan pintar o pegar carteles”, había dicho a LA GACETA.
Díaz argumentó que “hubo exceso de celo” del personal de la Patrulla Urbana que intervino en el procedimiento, en la esquina de Balcarce y Córdoba. Indicó, además, que hubo un llamado de atención para esos agentes.
Más allá de esa explicación del jefe de Policía, el radicalismo no está dispuesto a dejar pasar lo sucedido. "Realizaremos presentaciones en el área de Derechos Humanos de la Nación y en el Inadi, porque este es un acto discriminatorio, de persecución política. Vamos a ir a todos los organismos que hagan falta para garantizarle a los tucumanos que estos episodios no se van a repetir". afirmó Canelada.
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