Más sangre “charrúa” en San Martín

En La Ciudadela la idea es no dejar nada librado al azar. Según afirman puertas adentro, costó demasiado recuperar un lugar en la elite del fútbol criollo como, para ahora, escatimar esfuerzos. La misión es que San Martín logre afianzarse en la máxima categoría y por eso el armado del plantel es casi una cuestión de vida o muerte.

Si bien llegaron muchos refuerzos, la pretemporada parece haber quedado en el recuerdo y el inicio de la Superliga está cada vez más cerca, la CD sigue puliendo detalles en la conformación del grupo que tendrá el objetivo de asegurar la permanencia durante esta temporada.

Los estudios de la mesa chica que toma las decisiones en lo deportivo, indicaron que faltaba competencia en el lateral derecho de la defensa y, por eso, ayer quedó definida la contratación de Hernán Petryk. El defensor nacido hace 23 años en Punta del Este y cuyo pase pertenece a Peñarol, acordó su llegada al “Santo”, a préstamo por un año con una opción de compra.

“Hablé con Sebastián Pena y me dio las mejores referencias del club. Además, vi el clásico el otro día y lo de su hinchada es sorprendente”, dijo el defensor desde Montevideo, en diálogo con LG Deportiva.

Petryk se entrenó ayer por la tarde con Peñarol y luego se despidió de sus compañeros. Hoy por la mañana viajará a Buenos Aires, donde hará escala antes de llegar a nuestra provincia, pasado el mediodía.

Esta será la segunda experiencia del lateral en nuestro país, ya que en los últimos seis meses defendió la camiseta de Chacarita. “El fútbol argentino es muy dinámico y eso a los laterales nos favorece bastante. Soy un jugador al que le gusta pasar al ataque, espero poder cumplir con las expectativas y ayudar a conseguir los objetivos grupales”, aseguró el jugador, que disputó 11 juegos en el “Funebrero” y marcó un gol, en la victoria 2-0 sobre Vélez.

La misión ineludible de San Martín será salvar la categoría en su primera incursión por la Superliga. Por eso Petryk, con conocimiento de causa, deja en claro cuál es la receta para conseguirlo. “Hay que jugar al fútbol, respetar la identidad y no estar tan pendiente de las tablas. Hay que ir partido a partido, mentalizándonos en el rival de turno”, sentenció quien llegará para luchar el puesto con su compatriota Emiliano Albín y con Emiliano Purita.

“Llego a un club muy lindo, espero aprovechar esta oportunidad”, concluyó el lateral derecho, que además puede desempeñarse en cualquier posición de la defensa. Hoy arribará a La Ciudadela para transformarse en un pasajero más de un barco “santo” que sólo piensa dar que hablar en la Superliga.