Cuatro destinos tucumanos para sacar el campamentista que llevás dentro

RÍO GRANDE

Un chapuzón a metros del camping

Por Cecilia Bellomío

El río Grande queda en El Siambón, a 65 km de San Miguel de Tucumán. Se accede por la ruta 341 y se puede parar en un camping ubicado al costado del río. Para llegar a ese punto, hay que cruzar el puente del río y doblar a mano izquierda.

“Nosotros armamos las carpas bajo unos techitos que tiene el camping, por si llueve. Llegamos hasta Río Grande en nuestra casa rodante, que tiene muchos servicios, como heladera -por ejemplo- que es muy útil para llevar provisiones frescas. La cantidad de días que uno puede hacer allí dependerá de lo que a uno le guste hacer. Porque también es todo un lío armar la carpa por una sola noche. El río queda cómodo: llegás directamente desde el camping y en esta época no está tan crecido, porque no llovió mucho. Igual hay que tenerle respeto, como a cualquier río de montaña. En el menú siempre se planea un asado (el camping tiene asadores), un pollo al disco y hasta amasamos pastas caseras. Como viajo siempre con muchos chicos (ver foto de arriba), hacemos algo simple para ellos, como panchitos o hamburguesas. Para tener más comodidad y cocinar de todo, llevamos una garrafita de 3 kg, con un anafe. El camping también provee de electricidad y agua caliente”.

- Consejos:
 “Siempre hay que ubicar la carpa lejos de los ríos y de las quebradas o precipicios. Y cerca de los baños (en especial si se va con niños). Lo ideal es tener una visión general del camping, para tener más cuidado y estar atento a cualquier eventualidad. Si estamos en una época de lluvia, siempre hay que verificar si hay árboles viejos que puedan caerse. Alejarse de ellos. Alrededor de la carpa siempre pongo acaroína diluida en agua para repeler insectos. Por último, hay que tener especial cuidado con los animales: perros, caballos o vacas. Una jauría una vez nos comió toda la comida”.

Arroyo Portugués

En lo alto, sin basura y sin ruido

Por Pablo Zelaya Huerta (montañista)

- Se llega por el Camino a la Quebrada del Portugués. Desde El Mollar hay unos 12 km de ripio consolidado. Se puede circular a caballo, en auto o a pie. No se recomienda ir con lluvia.
- “Hay historia, vista y muchos arroyos para disfrutar en familia. Todo es praderas verdes, paisaje virgen, por lo que resultará un día de camping ideal. Siempre voy con mis hijos (en la foto con su hijo “Tomy”). Es tan salvaje el sitio que fantasean con cocodrilos, arañas y duendes. Se puede pescar y compartir unas horas con la familia Mamaní, que vive a orillas del río Pueblo Viejo. Ellos te venden el pan y compartís un poco de carne de oveja si deseás hacer un asado. Para acampar necesitás  carpa de dos estaciones (primavera-verano), colchonetas, repelente, equipo de cocina (calentador, ollas, cubiertos y vasos). Podrían sumar caña de pescar y disfrutar de la pesca. Hay arroyos con truchas pequeñas, que se dejan saborear. Sí se puede hacer una fogata, pero en sectores del arroyo donde se cuenta con recursos para apagar el fuego. Es un área protegida, ya que está en el Parque Provincial Los Ñuñorcos. La altura es de 1.750 metros sobre el nivel del mar. El arroyo queda sobre las faldas del Ñuñorco Chico y  el caudal no supera las canillas de los pies. Es bueno encontrarse con lugares vírgenes: cuentan con la presencia del hombre, no hay papeles, no hay ruido.

- Consejos: 
 “En todos los sectores de áreas protegidas pronvinciales, antes de acampar, hay que notificar a alguna autoridad el ingreso y egreso a las mismas. Existen en Defensa Civil planillas de ingreso y egreso a modo notificaciones, por seguridad se puede llamar al número 103. Por otra parte, es importante que la gente piense en que  genera residuos y que eso genera un impacto en el suelo. No hay que dejar rastros y a levantarlos.

Escaba

Accesible y con un ecosistema muy rico

Por Eugenio Mamberto  Virla

- Desde San Miguel de Tucumán hasta el dique hay 135 km. El clima para esta época es ideal, aunque hay que estar atento al pronóstico por si anuncian lluvias: años atrás Escaba de Abajo sufrió inundaciones. Al lado del puesto de Vialidad hay un local pequeño donde se pueden comprar provisiones. El camino está consolidado y no presenta inconvenientes en el trayecto desde el cruce del río Marapa hasta el propio dique. 
- “Escaba tiene una de las colonias de murciélagos más grande del mundo. De acuerdo al volumen de esa colonia, se estiman que se alimentan con unas siete toneladas de bichos. Ese es un dato a tener en cuenta: llevá repelentes e insecticidas. Para acampar necesitas aditamentos como bolsa, aislante, algo de abrigo y lo que vas a cenar. Es un lugar muy bonito, como si estuvieras en los siete lagos del sur. Entre las cosas interesantes para hacer, es un lugar ideal para el avistaje ornitológico. Tucumán tiene una gran diversidad de flora y fauna y -de por sí- Escaba, aunque es un ambiente artificial, tiene un ecosistema muy rico. Al ser un lugar accesible, podés llegar al embalse con kayak o gomones. Y si te vas en colectivo desde la capital, el gasto es mínimo: unos $ 50 a $ 60. Tucumán tiene esa factibilidad: no hay grandes distancias y en unos 25 minutos podés conocer lugares muy lindos, como la Quebrada de Lules. Y hablando del recorrido para llegar a Escaba, se pasa por lugares imponentes como el Parque Nacional Campo de los Alisos (tiene 17.000 hectáreas que en un futuro integrarán el Parque Nacional del Bicentenario) o el Parque Provincial Cochuna”. 

- Consejos: 
“Otra opción más que interesante es acampar en el cerro Horco, detrás de Raco. Por sus características, parece que estás en Nottingham (Inglaterra). Pero antes de elegir un destino, hay que tener en cuenta que los requerimientos en alta montaña son totalmente diferentes a los de otros puntos al aire libre o en un camping. Para empezar, si vas a un punto distante en el cerro lo primero que hay que hacer es avisar de tu partida a alguna autoridad, sea un puesto policial o de guardaparques”. 

La Cascada y el lago San Javier

Una opción clásica, en el corazón del cerro

Por Leonela Villarrubia (voluntaria de guardaparque en parque Sierra San Javier)

- San Javier queda a 25 km de San Miguel de Tucumán por la ruta 340. La reserva natural Parque Sierra de San Javier, que pertenece a la Universidad Nacional de Tucumán, cuenta con 14.174 hectáreas protegidas. Detrás de los viejos monoblocks de la Ciudad Universitaria se encuentra el lago San Javier, conocida también como “laguna de los patos”. Hay árboles, una brisa fresca y un puñado de patos que surcan el espejo de agua. Mientras que la cascada del río Noque está a unos pocos 8 km hacia el norte. La anuncia un vistoso letrero de madera a la vera del asfalto, que revela el inicio de una senda. 
- “Al lado de la laguna artificial está el camping, que tiene quinchos, merenderos, asadores y sanitarios. Para pasar el día se debe pagar por persona $ 20 (hasta 6 años no pagan), más unos $ 20 por carpa. Es un sitio accesible y cómodo para acampar, porque tiene una buena infraestructura y además hay un almacén que vende todo tipo de provisiones, desde gaseosas o verduras, hasta carbón.  El paisaje es hermoso: se puede recorrer el Bosque de la Memoria o ir a la cascada que queda a unos 8 km. Podés desplazarte a pie, en auto o en ómnibus (por  la ruta pasa el 118). En la cascada también se puede acampar y es seguro, porque todos los días los guardaparques trabajan en esa zona. Además, al ingresar te piden los datos (también de algún familiar por si ocurre algo). Allí debés abonar unos $ 20.  Por otra parte, ambos lugares son tranquilos: no se permite que vayan a alcoholizarse ni a escuchar música a todo volumen”.

- Consejos: 
“Si quieren ir los días más tranquilos, deben acampar de lunes a jueves. El fin de semana ingresan a esos lugares unas 200 a 300 personas. Por otra parte, no está permitido subirse a los monoblocks (es una estructura vieja), ni tampoco bañarse en el lago artificial (es muy profundo). Nuestro gran problema es la basura: es impresionante como se ven desechos en la cascada. Levantamos unas nueve bolsas de consorcio por día repletas de basura. Otro dato: en la cascada no hay señal de telefonía móvil”. 

Otros destinos para acampar

El Ente Tucumán Turismo tiene un listado de campings habilitados que están ubicados en toda la provincia. Se lo puede consultar on line en www.tucumanturismo.gob.ar. Allí figura, por ejemplo, Autocamping Las Moreras. Se ubica a orillas del río Loro. Para pasar el día hay que abonar $ 40 y por noche, $100. Tiene mesas, parrillas, sillas, sanitarios, agua caliente con duchas, juegos infantiles y acceso al río. Teléfono: 155611031. 

En Trancas se encuentra el Camping Municipal El Boyero. El ingreso es gratuito, se puede acampar y tiene baños, duchas sin agua caliente y asadores. Está ubicado en la ruta 9, antes de llegar a Trancas hay que doblar a la izquierda (hay un cartel). Sólo se abona el uso del baño. Más información en (03862) 421126, interno 111.

En Lules se puede acampar en el balneario municipal La Quebrada (Sutep). Tiene 1,5 hectárea con tres piletas, restaurante, merenderos y baños. Abre de martes a domingo. Está ubicado en la Quebrada de Lules y se accede por la continuación de la ruta 321, al pie del cerro. Se encuentra  unos 2 km de la plaza principal y junto al río Lules. Por informes se puede llamar al teléfono de la Dirección de Turismo de Lules (4918077).

En Monteros hay dos campings habilitados. El primero se llama Camping y Albergue de Capitán Cáceres. Tiene comedor, baños, duchas con agua caliente y asadores con mesas y bancos. También hay albergue para contingentes. Se encuentra a 14 km de Monteros, por la ruta 325. El otro camping se llama Los Torrejones. Tiene piletas, bar, merenderos, asadores, sanitarios, duchas y balneario en el río. Está ubicado en la ruta 38, km 758. Cobran $ 100 por persona. Por informes llamar al teléfono (03863) 416427. Los precios publicados, según Turismo, están sujetos a modificaciones sin previo aviso.