¿Dónde radica la fuente de autoridad para poder enseñar a otros?

¿Dónde radica la fuente de autoridad para poder enseñar a otros?

Vínculos y experiencias entre estudiantes, profesores y saberes

OBJETIVO. El estudio de Pierella explora el fenómeno de la autoridad de los profesores desde la perspectiva de los estudiantes universitarios. la gaceta / foto de antonio ferroni (archivo) OBJETIVO. El estudio de Pierella explora el fenómeno de la autoridad de los profesores desde la perspectiva de los estudiantes universitarios. la gaceta / foto de antonio ferroni (archivo)
05 Octubre 2014

ENSAYO

LA AUTORIDAD EN LA UNIVERSIDAD

MARÍA PAULA PIERELLA

(Paidos - Buenos Aires) 

Quienes hicimos de la docencia en universidades estatales el trabajo de nuestras vidas, hemos visto con frecuencia instalarse en el poder académico a verdaderos semianalfabetos en los cuadros directivos, desde los niveles más bajos a los más encumbrados. Y, naturalmente, las preguntas inevitables surgían solas: ¿Por qué estos centros que reúnen a la elite intelectual en ciencia, artes y humanidades, deben ser gobernados por personas ajenas al rigor intelectual, diestros en administrar trenzas y apropiarse del poder esgrimiendo ideologías? ¿Y por qué quienes gozan de autoridad académica están habitualmente alejados del poder en las universidades estatales?

Por otro lado, ¿con qué criterios los centros universitarios reconocen autoridad académica a sus miembros? “¿Dónde radica la fuente de autoridad para poder enseñar a otros? Este libro tiene por objeto explorar el fenómeno de la autoridad profesoral desde la perspectiva de los estudiantes universitarios” anticipa la autora en la introducción. El estudio tiene el formato de una tesis universitaria y se ubica temporalmente en las opiniones de estudiantes entre los años 2001 y 2010. Período que, a juicio de la autora, “está atravesado por el proceso de recuperación económica de las clase medias y de recomposición del campo político que implicó la recuperación de la legitimidad institucional y la revitalización de la participación política de los jóvenes”(página 17). Desde esta discutible afirmación, el libro toma un muestreo en las carreras de Contador Público, Física y Letras de la UNR para averiguar la opinión del alumnado sobre dónde ven sustentada la autoridad profesoral (en el sabio, por ejemplo) y también sus manifestaciones de desacralización.

Temporalidades

La autora sostiene que en la llamada Modernidad “tiene lugar una multiplicación o apertura de los fundamentos posibles de ser erigidos como autoridades, a partir de la desarticulación entre la autoridad, la religión y la tradición” (página 178). Hoy la autoridad pedagógica, “en tiempos en que las autoridades deben justificarse permanentemente, los procesos de legitimación están signados por la precariedad y la inestabilidad” (página 178). Mientras los profesores vivieron un una temporalidad convencida en el progreso y en la creencia de un futuro mejor, los estudiantes de principios del siglo XXI inician sus estudios “en el marco de una temporalidad fragmentada que pone en cuestionamiento la idea de una continuidad cultural liderada por la transmisión y apropiación del conocimiento como legado” (página 179).

“Respeto al profesor si él me respeta”, parece ser la nueva actitud del estudiante, dispuesto a conceder autoridad a quien lo respete y considere. Verdadera impugnación de relaciones jerárquicas y reclamo de ser tratados como “iguales”.

Las 200 páginas del libro, su estilo y su frondosa bibliografía harán que sea seguramente acogido por los especialistas en pedagogía.

© LA GACETA

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Jorge Estrella

Temas Buenos Aires
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