Un local y una mendocina ganaron la maratón

Como suele pasar en la maratón Don Orione, los integrantes del podio registran tiempos muy cercanos entre sí. La edición 19 que ganaron Exequiel Chavarría y Erika Hernández no fue la excepción.

Entre los atletas federados masculinos, Chavarría completó el recorrido desde plazoleta Mitre hasta la Dirección de Espacios Verdes en 10' 18". Juan Alderete con 10' 37" y Aron Quiroga con 10' 45", lo escoltaron.

Aunque hoy correrá una prueba de 10 kilómetros en Tafí Viejo, Chavarría no quería perderse la maratón Don Orione. "Es linda en todo sentido. Está bien organizada, me sirve para estar en ritmo, pero más que nada me gusta porque puedo ser solidario", reconoció el atleta de 24 años.

Chavarría ganó por segunda vez consecutiva la carrera, con una mejora en su tiempo. "Gané nuevamente porque vengo entrenando y entrenando con el profe Medina. Los otros chicos andan muy bien, así que sabía que debía meterle pata", dijo riéndose el ganador.

En damas, Hernández con 14' 07" se quedó con la carrera seguida por Julia Salazar 14' 15" y Gisell Alderete con 14' 28". Hernández tiene 22 años y se recibió de enfermera. "Es mi primera experiencia en esta maratón. Soy de Mendoza hace poco que me vine a vivir con mi familia", detalló la atleta. Si los que están habituados a la fiesta solidaria del deporte siguen sorprendiéndose, los de afuera mucho más. "Estoy emocionada de ver tanta gente y con un sólo objetivo como lo es ayudar al Cottolengo", concluyó Hernández.

Muchas maratones para una importante meta

La labor que realiza el Pequeño Cottolengo Don Orione es importante para la comunidad. La lista de solicitudes es larga y las condiciones deben adaptarse para aliviar a las familias que solicitan el ingreso de futuros residentes. Así que no es de extrañarse la meta que quieren cumplir desde la institución. "El objetivo es comenzar con un hogar nuevo", reveló Magdalena Paz de Buffo.

La presidenta de la Comisión de Damas del Pequeño Cottolengo sabe que la misión no será fácil. "No será con una sola maratón, así que hay que seguir trabajando para que podamos hacerlo rápido", advirtió Paz de Buffo. Si bien es una tarea que requiere un fuerte esfuerzo, el Padre Aníbal Quevedo, director del Cottolengo, es optimista. La respuesta solidaria de la sociedad tucumana se lo permite. "Año a año se supera. Estimo que este año tendremos más cantidad de maratonistas", afirmó Quevedo. Y cerró: "esto nos permite seguir creciendo y al mismo tiempo es una alegría saber que el Cottolengo convoca a este acto tan grande, que nos permite vivir la fiesta del deporte, de la familia y de la solidaridad. La gente que nos colabora es impresionante, simplemente gracias a todos".