Cristina negó una pelea entre Kirchner y Moyano

Cristina negó una pelea entre Kirchner y Moyano

La jefa de Estado también aseguró que "no hay cepo al dólar", opinó que hubo un intento desestabilizador en 2008 y criticó a Magnetto. En declaraciones televisivas, reveló que en las internas del 89, ella prefería al ex presidente Carlos Menem, aunque apoyaron a Cafiero.

30 Septiembre 2013
BUENOS AIRES.- La presidenta Cristina Fernández negó que el ex jefe de Estado, Néstor Kirchner haya mantenido una discusión telefónica con el titular de la CGT Hugo Moyano, la noche antes de su fallecimiento.

"Son todas fantasías, ciencia ficción. No se peleó con nadie", dijo la mandataria durante una entrevista con el periodista Jorge Rial transmitida por el canal América, y dijo que aquella noche del 26 de octubre estaban mirando un programa político por televisión.

Asimismo, dejó entrever que el candidato a Presidente en 2011 iba a ser su marido, al contar una anécdota en la que Luis D'Elía admitía que prefería a ella antes que al ex mandatario para esos comicios: "aunque midas 80 puntos, el candidato voy a ser yo", fueron las palabras de Kirchner.

Durante la primera parte de la entrevista, que continuará el domingo próximo, afirmó que "no hay ningún cepo" en torno del dólar y puso como ejemplo que se encontró con gran cantidad de argentinos en sus último viajes por el exterior.

"Cepo de ninguna manera", sostuvo en el marco del ciclo "Desde otro lugar" que ideó la Casa Rosada y recordó que cuando comenzó el gobierno kirchnerista se podían comprar U$S 100.000 mensuales para atesoramiento y que luego se aumentó a dos millones; pero añadió que "en ningún lugar del mundo se puede hacer eso "sin decir para qué". Reiteró que durante su gobierno hubo intentos de corrida bancaria y aseguró que los dueños de los bancos "no son amigos ni enemigos, son banqueros".

Intentos destituyentes
Afirmó que tras el triunfo electoral que le dio la reelección en 2011, hubo sectores económicos que "intentaron desestabilizar" al gobierno, y lo emparentó con lo que sucedió en 2008 durante el conflicto con las organizaciones agrarias.

"Hubo un claro intento destituyente. Creo que hubo un intento de imponerle condiciones a un Gobierno que había ganado casi con el 55%. Cinco mil millones de dólares en una corrida bancaria no lo hacen ni dos ni tres personas", señaló. El intento desestabilizador se dio en 2008, durante el conflicto con la Mesa de Enlace, resaltó y agregó que "de Clarín y de (Héctor) Magnetto creo cualquier cosa".

Relató que "ni siquiera en ese momento de debilidad de él (por Néstor Kirchner) me sentía desprotegida", al contar que tras la derrota legislativa de la resolución 125 "en la madrugada él me dijo `siento que no voy a poder protegerte más".

Desmintió que haya pensado en renunciar y manifestó que "hubo un momento donde él sintió que se había equivocado de quién era mi compañero de formula" y expresó que "verlo derrumbado fue muy fuerte, porque él era la imagen de la fortaleza y la protección".

En otro tramo de la entrevista se refirió a los periodistas que "diagnostican" acerca de su estado de salud y puntualmente, al ser consultada por Nelson Castro, expresó: "me contaron que me habla por el televisor; me parece que el que tiene que ir al psicólogo es él".

Contó que cuando mataron al militante Mariano Ferreyra, Kirchner "estaba desencajado" y que le dijo "nos quieren armar un Kosteki y Santillan", al aludir al impacto que tuvo ese episodio en la salud del ex presidente. "Ese caso lo conmocionó mucho", dijo Cristina, quien recordó que cuando fue el asesinato de los militantes en el Puente Pueyrredón Clarín tituló "La crisis causó dos nuevas muertes" y que "hay una editorial de La Nación, aún peor, donde se levanta la labor de la policía de la provincia de Buenos Aires". "A él se le quedaron las imágenes grabadas y se juntó con lo que había vivido en la juventud", afirmó y relató que el ex presidente "durante mucho tiempo de noche gritaba, soñaba, sonámbulo de lo que había vivido en los 70`". "En la interna del '89, yo quería estar con Carlos Menem y él con Antonio Cafiero. A mi me gustaba porque hablaba del trabajo, era carismático", aunque negó que haya sido "menemista". Dijo que a pesar de las discusiones, ganó la opción de apoyar a Cafiero, hecho que ella acató "como buen orgánica que soy". (DyN-Télam)

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