Salomón y Toledo empatan y van a penales

Salomón y Toledo empatan y van a penales

El actual presidente del Concejo de Yerba Buena busca ser reelecto, pero ediles cercanos al jefe municipal impulsan su desplazamiento. El concejal alperovichista suma cuatro aliados, mientras que el toledismo tiene cinco voluntades. En caso de que persista la paridad, desempata el titular del cuerpo.

PULSEADA. Salomón (izquierda) llegó a la presidencia del Concejo con el aval de Alperovich, pero ediles aliados a Toledo (derecha) quieren desplazarlo. LA GACETA / OSVALDO RIPOLL PULSEADA. Salomón (izquierda) llegó a la presidencia del Concejo con el aval de Alperovich, pero ediles aliados a Toledo (derecha) quieren desplazarlo. LA GACETA / OSVALDO RIPOLL
05 Octubre 2010
Pusieron sus manos una sobre otra y se juraron fidelidad. En una reunión privada, cinco ediles de Yerba Buena -la mitad del Concejo Deliberante- ratificaron su unidad para disputar palmo a palmo la conducción del cuerpo con los concejales aliados al intendente, Daniel Toledo.

En rigor, la renovación de la mesa de autoridades del Concejo se convirtió en una pulseada personal entre el actual presidente, el alperovichista Ricardo Salomón, y el jefe municipal peronista.

El ex arquero de Atlético Tucumán llegó a la titularidad del cuerpo en 2005 con el guiño del gobernador, José Alperovich. Desde esa oportunidad, fue reelegido por sus pares de manera ininterrumpida y encabezó la lista de concejales del Frente para la Victoria en 2007. Precisamente ese año, Toledo resultó electo intendente por el alperovichismo. Pero la relación entre ambos dirigentes justicialistas de la "Ciudad Jardín" tardó poco en desgastarse.

Antecedentes
Las diferencias políticas entre Salomón y Toledo se acentuaron con el correr de la gestión. Incluso, ya durante el proceso de renovación de autoridades del Concejo Deliberante del año pasado hubo rumores que daban cuenta del descontento del intendente para con el concejal justicialista.

Sin embargo, el ex futbolista fue reelegido como presidente por unanimidad. No obstante, sí fue desplazado de la vicepresidencia primera Leonardo Tusa (Participación Cívica), un edil de excelente relación con el intendente. Ya en marzo de este año se produjo otro hecho por demás significativo: Salomón, como presidente del Concejo, adujo inconvenientes de última hora para no asistir al acto de apertura de sesiones ordinarias del cuerpo y a la lectura del discurso anual de Toledo en el recinto. En el entorno del jefe municipal tomaron ese faltazo como un desaire político.

La confección de la mesa de conducción del Concejo debe concretarse durante este mes. Sin embargo, la fecha de la sesión es aún incierta. Para su reelección, Salomón cuenta con el aval de José Marrades (Frente para la Victoria), del aliado oficialista Roberto Terán Vega (Acción Provinciana, actual vicepresidente primero), y de los opositores José Domián (laborismo) y María Victoria Cossio (Recrear). Incluso, anoche mantuvo una reunión con el gobernador en la Casa de Gobierno.

En tanto, el sector alineado con el jefe municipal pretende postular para presidente a Lucas Alfredo Carrizo (Comunidad en Organización) con los votos de Tusa, de Alejandro Sangenis -h- (Acción Regional), de Walter Ción (ex Libres del Sur) y de Patricia Carreras (Frente para la Victoria).

Si los ediles mantienen las posiciones políticas, una eventual votación en el recinto quedaría empatada. En ese caso, el reglamento prevé que sea el presidente quien desempate. La cuestión es que, hasta el día en que se haga la sesión, los tanteos de un lado y del otro para torcer la votación serán una constante.

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