Netflix vuelve a apostar por el suspenso nacional con el estreno de La huella del mal, un thriller policíaco ambientado en un escenario tan inusual como poderoso: el yacimiento arqueológico de Atapuerca. Protagonizada por Blanca Suárez y Daniel Grao, esta nueva producción española aterriza en el catálogo este miércoles 30 de julio, en una jugada poco habitual para la plataforma, que suele reservar sus estrenos para finales de semana. Pero la apuesta es clara: enganchar al espectador desde el primer minuto con una mezcla de crimen, tensión emocional y escenarios únicos.
Un crimen con ecos del pasado
Basada en la novela homónima de Manuel Ríos San Martín —quien también dirige el filme—, La huella del mal ofrece 105 minutos de intriga constante. La trama se inicia con el hallazgo del cadáver de una joven en Atapuerca, en circunstancias que remiten a un asesinato ritual ocurrido seis años antes. El caso recae sobre dos inspectores, Silvia Guzmán (Blanca Suárez) y Daniel Velarde (Daniel Grao), quienes no solo deben descifrar el crimen, sino enfrentarse a sus propios fantasmas y a una tensión sexual latente que da humanidad al relato.
Blanca Suárez se consolida en el género del thriller con un personaje intuitivo y emocionalmente complejo, mientras que Daniel Grao aporta profundidad con un inspector marcado por el pasado. El reparto se completa con rostros conocidos de la televisión como Aria Bedmar (Acacias 38), Víctor Palmero (La que se avecina), Pablo Rivero (Cuéntame) y Fernando Cayo (La casa de papel), todos ellos contribuyendo a construir una atmósfera intensa y verosímil.
Atapuerca: escenario ancestral para un thriller moderno
Rodada entre Navarra y el propio yacimiento de Atapuerca, la película utiliza con inteligencia el contraste entre lo ancestral y lo contemporáneo. No es solo un thriller más: La huella del mal juega con el simbolismo de los huesos prehistóricos frente a los crímenes del presente, en una historia que cruza arqueología, psicología criminal y pasión contenida.
Aunque no se trata de una producción 100% original de Netflix, la plataforma participa como coproductora y garantiza su distribución internacional, lo que podría convertirla en uno de los thrillers españoles más vistos del año. Aún sin fecha confirmada para su emisión en TVE, todo apunta a que el boca a boca será clave en su éxito.
Un thriller eficaz para el verano
En un verano dominado por comedias ligeras y éxitos internacionales como los doramas coreanos o el anime japonés, La huella del mal ofrece una alternativa distinta: una historia compacta, directa, cargada de tensión narrativa y con un reparto sólido.
Para quienes buscan un thriller español con identidad propia, giros inesperados y una atmósfera inquietante, esta es una apuesta segura. Desde ya disponible en el catálogo de Netflix, La huella del mal promete mantenerte pegado a la pantalla. Porque el verano también puede tener sombras.