Preocupa el auge del tráfico de fauna: creció 64% el rescate de aves silvestres en Tucumán

UNA CRÍA DE COMADREJA. El animal se recupera en la sede de Recursos Naturales que está en El Cadillal.

La división Delitos Rurales secuestró 1.581 ejemplares en lo que va de 2025. Las aves lideran el mercado negro de fauna silvestre, y los operativos se intensifican.

Silvia De Las Cruces
Por Silvia De Las Cruces 27 Julio 2025

Un control de rutina en el barrio Soldado Tucumano, en Banda del Río Salí, terminó con un hallazgo preocupante: un hombre llevaba en su mochila tres tortugas semiacuáticas dentro de un recipiente plástico. Estos animales, amparados por la Ley Provincial de Protección de Flora, Fauna y Suelos, son apenas una muestra de lo que ocurre a diario en Tucumán. El tráfico ilegal de fauna silvestre sigue en alza y los números lo confirman.

Aunque el tráfico involucra a distintas especies, las aves silvestres encabezan la lista de secuestros, según advierte el comisario Miguel Amaya, jefe de la División de Delitos Rurales y Ambientales N°1 de Burruyacu. Durante todo 2024 se rescataron 962 aves; en lo que va de 2025, ya se contabilizan 1.581 ejemplares. El incremento es del 64%.

¿Qué explica este crecimiento? ¿Aumentó el comercio ilegal o se intensificaron los controles? “Son dos las razones”, responde Amaya. “El mercado negro siempre existió, pero con la última reestructuración de la cúpula policial, se cambió la metodología de trabajo, se profundizaron los operativos y estos son los frutos. A eso se suma que, una vez que tomó estado público lo que veníamos haciendo, la gente empezó a animarse a denunciar de forma anónima”, detalla.

Las denuncias ciudadanas resultaron clave: gracias a ellas, los efectivos lograron allanar domicilios donde encontraron grandes concentraciones de aves en cautiverio. “Nos pasó que en una casa hallamos más de 250 animales; en otra, unos 150... por eso estos números”, remarca el comisario.

VIAJABA EN UNA ENCOMIENDA. Los policías encontraron una boa constrictor dentro de una caja de cartón. VIAJABA EN UNA ENCOMIENDA. Los policías encontraron una boa constrictor dentro de una caja de cartón.

Los ejemplares más comunes en estos secuestros son reinas moras, cardenales, jilgueros, petiteros, catas, loros y lechuzas. “Los atrapan con trampas en zonas silvestres, los enjaulan y luego los venden. Una reina mora puede costar $30.000; un cardenal, entre $50.000 y $70.000 si es cantor, y por un rey del bosque llegan a pagar hasta $100.000”, enumera Amaya.

No solo las aves están en la mira del tráfico ilegal. Algunos animales exóticos alcanzan cifras aún más impactantes. El comisario recuerda que hace pocos meses interceptaron una boa constrictor que viajaba en la bodega de un colectivo como encomienda: venía del norte y tenía como destino final la provincia de Buenos Aires. “Por ese reptil se puede pagar más de un millón de pesos”, señala.

A lo largo del año también secuestraron otras especies poco frecuentes: un gekko (lagarto pequeño), una lampalagua, un oso melero, un lince, más tortugas y gatos del monte, entre otros.

UN ÁGUILA MORA. Ibarra se ocupa de recibir y evaluar a las aves. UN ÁGUILA MORA. Ibarra se ocupa de recibir y evaluar a las aves.

¿Qué sucede con los animales rescatados?

Luego del decomiso, los animales son trasladados a la sede de Recursos Naturales de la Provincia, ubicada en El Cadillal. Allí, un equipo de profesionales se encarga de evaluarlos y decidir su destino: liberación inmediata, permanencia temporal en el centro o derivación a otras instituciones especializadas.

“Recibimos principalmente aves, que la gente tiene como mascotas por sus cantos o sus plumas. En general, llegan en mal estado: muchas están hacinadas en jaulas minúsculas o ni siquiera son retiradas de las trampas en las que las capturaron. Vienen con un estado sanitario pésimo”, lamenta Alicia Ibarra, licenciada en Ciencias Biológicas y responsable de la división de Fauna Silvestre.

El primer paso es una desparasitación y una evaluación clínica. En casos urgentes, ese proceso se realiza de manera virtual para no demorar la liberación. Las aves que llegan más comprometidas suelen ser las lechuzas: “A menudo vienen con fracturas en las alas, y deben ser sacrificadas porque la recuperación es muy traumática para ellas. Son casos muy dolorosos”, confiesa Ibarra.

La situación es aún más compleja con los mamíferos, que requieren un protocolo de rehabilitación diferente y más extenso. “Tenemos contacto con otras instituciones que trabajan en proyectos de conservación, como la reserva de Horco Molle. En esos casos, los trasladamos para que sean tratados y luego se evalúa si pueden ser liberados”, explica.

RESCATES MASIVOS. Llegaron a hallar 250 aves en una misma casa. RESCATES MASIVOS. Llegaron a hallar 250 aves en una misma casa.

Cómo actuar

La Ley 6292 en Tucumán establece el marco normativo para la protección, conservación y uso sostenible de la flora silvestre, los recursos biológicos acuáticos y la fauna silvestre. Está prohibido tener como mascota estas especies. Si conocés que se están comercializando estos animales, podés denunciar mediante correo electrónico y de manera anónima, escribiendo a delitosrurales@policiadetucuman.gob.ar. Si por alguna razón tenés algún ejemplar en tu casa, comunicalo a dfaunasilvestre@gmail.com.

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