06 Julio 2025
SEGÚN EL INDEC. Los salarios le ganaron a la inflación en octubre.
Un nuevo informe de la consultora Moiguer expone las cifras que hoy definen la pertenencia a las distintas clases sociales en Argentina. Según el estudio, aunque la economía muestra señales de recuperación parcial, la mejora no alcanza a todos por igual: los sectores altos amplían su consumo mientras los ingresos de las clases media y baja siguen estancados, profundizando la desigualdad.
Ingresos para ser considerado clase media: las cifras clave
El relevamiento, que analiza los ingresos mensuales por hogar en el segundo trimestre de 2025, establece estos umbrales para la clase media:
Clase media típica (C2): ingresos a partir de $3.122.836 mensuales.
Clase media baja (C3): ingresos desde $1.564.000 mensuales.
De acuerdo con Moiguer, el 44% de los hogares argentinos se ubica en estos dos segmentos de clase media. Sin embargo, la mitad de la población vive con sueldos por debajo de estos niveles, reflejando la fuerte desigualdad que atraviesa al país.
La mayoría pertenece a la clase baja: una realidad extendida
El estudio indica que el 50% de los hogares argentinos son considerados de clase baja, con ingresos que no alcanzan a cubrir con holgura los gastos esenciales. Este grupo se divide en:
Clase media vulnerable (D1): ingresos de $1.120.600 mensuales.
Clase pobre (D2/E): ingresos de $585.800 mensuales.
Esta franja depende en gran medida de la asistencia estatal, a través de programas como la Asignación Universal por Hijo (AUH) u otros beneficios sociales.
En el extremo opuesto, la clase alta concentra un poder adquisitivo muy superior al promedio:
Clase media alta (ABC1): ingresos de $9.105.000 mensuales.
Clase alta (AB): ingresos que superan los $20.500.000 mensuales.
Estos sectores son los que más consumen en dólares: compran bienes importados, realizan viajes al exterior y suelen ahorrar fuera del sistema financiero local.
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