Galería 25 fotosLas banderas de la gran nación aborigen no faltaron a la fiesta.
El sábado 27 de enero León Gieco conmocionó a los Valles Calchaquíes con un recital impecable de más de tres horas en Amaicha del Valle. Más de 18.000 personas vibraron en un concierto abrazado por las montañas imponentes. Antes de León tocaron varios grupos que amenizaron el ingreso del público al predio, donde no faltó baile ni cánticos políticos, a tono con el perfil del recital. Fotografías de Franco Vera.
Una de las copleras que León invitó a subir al escenario en medio del recital.
El público va llegando al predio en un atardecer mágico.
La cancha de fútbol de Amaicha empieza a llenarse mientras los grupos teloneros acompañan la espera.
Junto con las copleras, también subió al escenario un representante de las comunidades indígenas, quien leyó un manifiesto donde exigieron la devolución de la ciudad sagrada de Quilmes, entre otros reclamos.
Gieco interpreta una de sus primeras canciones.
Dos pantallas proyectaron video clips durante todo el concierto.
El público acompañó a León con las palmas todo el concierto.
Otro de los momentos más emotivos del concierto, cuando cantó “Ojo con los orozco”.
Gieco saluda a los fans al llegar a Amaicha.
Otro momento del concierto que duró más de tres horas.
León y su armónica junto a una luna de tango.
El atardecer amaicheño, durante la previa del recital.
Uno de los solos más conmovedores, cuando cantó “La Navidad de Luis”.
León canta “La Memoria”, uno de los temas más pedidos por la gente.
Otro momento de “La Navidad de Luis”.
Gieco canta mientras se proyectan videos de sus primeros recitales.
El músico caminó por Amaicha antes del concierto, donde saludó a todo el mundo.
León en todo su esplendor, sobre el final del show.
Antes de que Gieco subiera al escenario ya había comenzado la fiesta, en un marco imponente.
Homenaje a las mujeres en lucha, que se repitió varias veces a lo largo del concierto.
Antes del recital Gieco se reunió con caciques y representantes aborígenes, con quienes conversó, escuchó reclamos y, como siempre, comprometió su apoyo.
León escucha a un coplero, uno de los que luego subió al escenario.
Plano imponente de público en la noche de Amaicha, con más de 18.000 personas en el campo.
El final del concierto, con todos los músicos en escena cantando la mítica “Sólo le pido a Dios”.
