Hicieron experiencia con los mejores del mundo

El Enduro World Series debe ser el circuito profesional más nuevo que hay en el planeta. Es apenas el cuarto año en que los que practican el deporte miden fuerzas para saber quiénes son los mejores del mundo en cada categoría. En la presente temporada, varios tucumanos aprovecharon la cercanía geográfica de la disputa de las primeras dos fechas (Corral, Chile, y Bariloche) y se animaron al desafío. En la lista se apuntaron Javier Santiago, Gustavo Cisneros (h), Jorge Robles Ábalos, en ambas, y Mario Bravo, Lourdes de la Orden y Adrián Ríos, sólo en la Patagonia.

Todavía la aclaración debe hacerse: el enduro en estas líneas se refiere a una variante del mountain bike y nada tiene que ver con el motociclismo. “Es una modalidad que está en crecimiento porque es completa y divertida; hace varios años que lo digo”, describió Santiago. Formado en la modalidad descenso, el rider empezó a conocer y encantarse con la bicicleta de enduro en sus viajes a Europa por las competencias de la otra disciplina. En el Viejo Continente la modalidad surgió hace unos 10 años. “Hay que tener la condición física de un corredor de cross country y la técnica del descensista”, combinó sus palabras Santiago que hizo un balance positivo de sus actuaciones en las fechas mundiales, sobre todo en la chilena. “Terminé detrás de tres locales y a nada, a un segundo y medio”, destacó Santiago, cuarto en la categoría Master A y mejor argentino en la divisional.

Junto a Cisneros y Robles Ábalos, Santiago formó una suerte de equipo para hacerse compañía en los viajes. “Había que aprovechar estas dos fechas que estaban pegadas. Fue muy lindo”, calificó Robles Ábalos, ex rugbier “verdinegro”. “El enduro tiene la diferencia en que con la bici se puede bajar y también subir, pero disfrutando mucho más”, opinó el rider de 37 años. Y dio su “sentencia”: “me quedo con el enduro porque es mucho más divertido y se aprovecha más el paisaje”.

Para Cisneros es más difícil seleccionar una de las dos modalidades. “No es que una me gusta más y otra menos; son distintas. En descenso hay sólo un circuito y en el enduro, por ejemplo en la carrera de Bariloche, había seis etapas distintas. En el enduro se necesita más improvisación, mientras que en el descenso hay que saberse de memoria el circuito”, estableció el yerbabuenense. Precisamente Cisneros fue quien inauguró (también se sumó Alejandro Rodríguez) la nueva apuesta de la Copa Tucumana de Descenso que incorporó una categoría (ver “Para conocer”) con las bicicletas de enduro.

El próximo 8 de mayo se correrá la segunda fecha de la Copa Tucumana de descenso.

En el circuito “Las Arañas”, en Villa Nougués, se podrá ver en acción a las bicicletas de enduro.

El formato de competencia no será el mismo que se emplean en las fechas a nivel nacional o mundial.

En Villa Nougués se descenderá el circuito con la bici de enduro, pero no habrá enlace para llegar al circuito, ni los riders estarán condicionados para cumplir un determinado horario.

Será una buena oportunidad para ver cómo trabaja la mecánica de la bicicleta de enduro que, por el sistema de doble suspensión y una geometría distinta a las bicicletas de montaña de cross country o de descenso, brindan un mayor confort.