01 Octubre 2015
BEATRIZ AVILA. ARCHIVO LA GACETA
La legisladora Beatriz Ávila renunció a la banca como concejal electa por la Capital. La esposa de Germán Alfaro formalizó la dimisión hace unos minutos ante la Junta Electoral Provincial. Avila ganó su lugar encabezando el acople “Viva la Ciudad”, que acompañó al Acuerdo para el Bicentenario.
En un breve diálogo con LA GACETA, la dirigente peronista adujo razones estrictamente personales para dar ese paso. “En lo personal, creí que quedarme en el Concejo Deliberante podría dar lugar a malos entendidos, suspicacias y sensiblidades, ya que mi esposo, asumirá como intendente de San Miguel de Tucumán. Mi presencia podría llegar a entorpecer los debates o el diálogo entre los concejales”, justificó la actual legisladora peronista.
Apuntó que “si bien la ley no tiene reparo alguno en que asuma, los que tenemos como horizonte una mejor calidad institucional debemos predicar con el ejemplo”. Precisó que si bien no accederá a la banca de concejal continuará trabajando en el ámbito social y sanitario en su doble rol de militante compañera del futuro jefe municipal.
Avila destacó que “no es imprescindible un cargo para hacer política por los que menos tienen”. En su lugar asumirá el radical Raúl Pellegrini, quien la secundó en la boleta electoral del 23 de agosto.
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