Un rompecabezas con textos de Piglia

Selección

ANTOLOGÍA PERSONAL

RICARDO PIGLIA

(Fondo de Cultura - Buenos Aires) 

En el prólogo de su Antología Personal, Ricardo Piglia explica que los textos propios –algunos de ellos inéditos- que seleccionó para que compongan el libro son heterogéneos y fueron escritos en distintos épocas. Dos páginas más adelante sugiere una posible clave de lectura: la del detective que debe resolver un enigma. Cada texto sería, de algún modo, la pieza de un rompecabezas que el lector debe armar.

Lo que Piglia no dijo es que, como en “Carta Robada”, uno de los cuentos policiales que fundaron el género, la solución está a la vista. En el cuento de Poe se presenta el caso de una carta que fue sustraída. Tras arduas búsquedas, la carta resulta estar escondida a la vista de todos. Este caso es análogo: en el mismo enunciado, es decir, en el prólogo, están postuladas las dos grandes cuestiones que atraviesan de lado a lado la obra de Piglia. La primera es cómo la ficción influye en la realidad, cómo la narración estuvo ligada al hombre desde siempre.

La segunda es el modo de leer. “La disposición a leer poéticamente, según Gombrowicz, es lo que constituye como poético a un texto”, dice en una de las conferencias. La noción de que los modos de leer los géneros literarios y obras consagradas no son más que convenciones, formas en que todos se han puesto de acuerdo para leer de una misma manera, es una de las grandes tesis de Piglia, que además de Gombrowicz ya anunció también Borges en su ensayo “Sobre los clásicos”.

Pero el autor de Respiración Artificial nunca deja un asunto sin llevarlo hasta el fondo. Los modos de leer dan lugar a la teoría del complot, un fenómeno típico de la literatura argentina que inaugura Arlt. Complot en tanto grupo clandestino que busca modificar una realidad, la amenaza latente. ¿Qué pasa cuando un pequeño grupo decide cambiar el modo de leer? Todos los textos de la antología van en una misma dirección. Cada uno es parte de un recorrido y en cada una se le da al lector una herramienta, una pista para seguir armando el rompecabezas. De la idea de complot se desprende su antónimo, el consenso, lo establecido, y cómo las convenciones crean realidades desde el lenguaje. Varios cuentos, entre ellos “La nena”, abordan la problemática del lenguaje y los discursos como aparatos formadores de realidad.

En uno de los relatos se envían mensajes secretos cifrados en informes meteorológicos. Para descifrarlos hay que leer del modo correcto. Asimismo esta antología puede ser, según cómo se lea, una antología o una novela policial.

(c) LA GACETA

Pablo Nardi