“Hoy es coronavirus hasta que se demuestre lo contrario”

“Hoy es coronavirus hasta que se demuestre lo contrario”

Eduardo López, asesor en temas sanitarios del presidente, Alberto Fernández, opina que hay muchos contagios ocultos. “La fiebre no siempre está presente al comienzo”, advierte.

CONTUNDENTE. López dice que “el ciclo lectivo será de las últimas actividades que se normalizarán”.  CONTUNDENTE. López dice que “el ciclo lectivo será de las últimas actividades que se normalizarán”.

Argentina se prepara para que el huracán coronavirus toque tierra. El aislamiento decretado por el presidente, Alberto Fernández, al detectarse los primeros casos, ha ralentizado la propagación de la pandemia y le ha dado al país un tiempo de preparación. El 20 de marzo, los epidemiólogos estimaban que el mayor número de contagios se registraría a mediados de abril. A un mes del confinamiento, ese horizonte se ha postergado para fines de mayo y a decir del infectólogo Eduardo López, integrante del comité médico que asesora al Gobierno, se tienen que aprovechar estas semanas de gracias para testear más.

Esa junta está integrada por ocho expertos que discuten qué hacer con la pandemia. Algunos se animan a retrasar el impacto para junio. Otros, más optimistas, confían en que no se produzca un pico agudo, sino una meseta. López se oye cauto. Califica como un acierto el confinamiento anticipado y la construcción de hospitales de campaña para futuros pacientes covid-19, pero advierte: “hasta que se efectúen más tests, habrá muchos contagios ocultos; no se dimensionará la incidencia de la enfermedad”.

Infectólogo del Hospital Ricardo Gutiérrez y director del postgrado de infectología pediátrica de la Universidad de Buenos Aires, apenas tiene tiempo de charlar con este diario debido a la sucesión de videoconferencias en la que se ha convertido su vida. “Me han perseguido todo el día: merecen mi atención (se ríe). Hoy -añade ahora con seriedad-, hay que pensar que es coronavirus hasta que se demuestre lo contrario. Todo individuo que tenga fiebre y tos; fiebre y dolor de pecho o fiebre y dolor de garganta tiene que ser aislado”, afirma.

- ¿Cuáles deberían ser nuestros próximos pasos?

- Hay pocos países con 44 millones de habitantes y unos 2.000 casos... Si testeamos más, seguramente esa cifra aumentará. Y ese aumento no será para peor, sino mejor: nos permitirá identificar a los casos leves, esos que no llegan a los hospitales, para aislarlos y evitar que contagien a los vulnerables, especialmente.

- ¿Por qué no se hacen tests masivos?

- Es una técnica cara y en esta etapa no vale la pena testear a los asintomáticos. No estoy a favor de los testeos masivos, sino dirigidos: debemos aumentar el número de pruebas donde haya sospecha o circulación comunitaria. Por ahora, la provincia de Tucumán parece estar a salvo. Pero eso puede cambiar en cualquier momento.

- ¿A quiénes testeamos, entonces?

- El gran transmisor es aquel que tiene pocos o ningún síntoma. Se ha visto que la fiebre no siempre está presente al comienzo de la enfermedad. Ante eso, creo que habría que considerar sospechosos a aquellos que presentan sintomatología respiratoria.

- ¿Le preocupa que vayamos a recibir el impacto del coronavirus en invierno?

- Todos los virus respiratorios, y el covid-19 no es la excepción, se sienten más cómodos en invierno que en verano. No en vano a los europeos los esperanza la llegada del calor.

- Inicialmente se esperaba ese pico para mediados de abril. ¿A qué se debe el cambio?

- Creo que el Gobierno nacional ha abordado esta crisis sanitaria con seriedad. Hemos hecho una cuarentena precoz. Eso ha sido bueno y se ha reflejado en las cifras. Pero a título personal, le repito que antes de flexibilizar las medidas aumentaría los testeos. Los países que mejor han controlado la pandemia son los que han aplicado dos fórmulas: un confinamiento estricto y muchas pruebas.

- ¿Qué cree que pasará en la Argentina?

- El hecho de haber extendido la cuarentena hasta fines de abril ha provocado que el pico también se haya corrido. Esperamos ese momento para fines de mayo. Lo que ocurra en los próximos meses dependerá del éxito o no del aislamiento y de las medidas de prevención. Si se mantienen, habremos pasado el reto. Normalmente, el pico de casos activos dura dos semanas. Después tiende a bajar. De ser así, es probable que al terminar julio la pandemia comience a ceder en nuestro hemisferio.

- Y si la cuarentena no ha sido bien acatada, ¿qué pasará?

- Recuerde que el virus nos golpeará en época fría. Necesitaremos que el sistema sanitario esté listo para recibirlo y que los adultos mayores y las personas con enfermedades de base se contagien lo menos posible. Los casos autóctonos son los que van a definir la curva.

- ¿El coronavirus desaparece con el calor?

- A más de 27° grados, la efectividad del virus disminuye en un 50%. A más de 30°, disminuye hasta un 80 %. Hay que soportar esta situación dos o tres meses más.

- Hábleme de las escuelas y universidades.

- No podemos abrirlas. El ciclo lectivo será de las últimas actividades que se normalizarán.

- ¿Cómo acaban las pandemias?

- Tenemos que encontrar una vacuna. Si aparece, esto quedará como una enfermedad más de invierno. Una vez que cierta cantidad de personas haya alcanzado la inmunidad, el virus se desvanecerá porque no puede vivir afuera del organismo humano. El único riesgo es que, en alguna de sus mutaciones, se vuelva más peligroso.

Comentarios