14 Febrero 2020
No hay dudas que el foco central de la polémica de ayer fue el propio gobernador Juan Manzur, que protagonizó una charla con la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, fuera de micrófono. Sin embargo, estos estuvieron abiertos. Fue más perceptible en el streaming (un servicio multimedia en tiempo real) que en el mismo salón del Catalinas Park. Sonidistas consultados por LA GACETA dieron sus puntos de vista acerca de lo que sucedió ayer con el audio. “Debe haber quedado abierto un micrófono de sala, que no es el mismo que usaban en el streaming. Puede haber habido otro micrófono que haya quedado abierto o que haya estado cerca y creían que no iba a salir el audio por los parlantes”, dijo un profesional que prefirió no dar su nombre.
Otro especuló que, en todo caso, se dejaron abiertos los micrófonos ante la cantidad de expositores que se preveía que hablarían durante el acto de inauguración del plenario. Generalmente, en este tipo de encuentros se trabaja con una consola de sonidos, en la que están conectados todos los micrófonos conocidos como cuello de cisne. “Cada micrófono entra en un canal diferente a la consola. Desde ese aparato suelen conectarse a los parlantes del lugar y otros van directamente a la computadora que está haciendo el streaming”, explicó otro referente de la actividad.
Al gobernador se lo escuchaba más nítidamente que al resto de las autoridades porque estaba más cerca del micrófono. Pero eso son sólo cuestiones técnicas. La reacción de la dirigencia fue, precisamente, por el contenido de las frases del mandatario provincial, que requirieron más explicaciones institucionales que cuestiones técnicas.
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