El escrutinio definitivo en Tucumán amplió la diferencia entre Alberto Fernández y Mauricio Macri, cuando aún restan que se carguen en la planilla los votos de las personas privadas de la libertad y de los tucumanos que sufragaron en el extranjero.
El recuento provisorio del 27 de octubre había cerrado con 584.885 votos para la fórmula Fernández-Cristina Fernández de Kirchner; y 532.466 adhesiones para la lista legislativa encabezada por Mario Leito. El conteo definitivo, en tanto, confirma que el Frente de Todos cosechó 591.585 votos en la categoría Presidente y 540-372, en Diputados.
A pesar de los mínimos cambios, el reparto de las cinco bancas de diputados no se modifica, por lo que el peronismo sentará tres legisladores nacionales y el macrismo, dos.
La diferencia de votos en blanco es otro de los datos curiosos de la votación. Sólo 7.733 optaron por no elegir Presidente, pero 53.552 rechazaron a todas las nóminas legislativas.
El resultado del domingo sí confirma el envión que tuvo el macrismo entre agosto y octubre. En ese lapso, en Tucumán, el saliente presidente sumó más de 108.000 votos "extra" (pasó de 239.025 sufragios a 347.149), mientras que Alberto Fernández mejoró su cosecha, pero en menor proporción: de 569.809 votos en las PASO a 591.585 adhesiones en las generales.
Respecto de la participación de los votantes, la Justicia Electoral Nacional registra que sufragó el domingo 27 de octubre un 82,64% del padrón tucumano. Este porcentaje ubica a esta elección entre las más altas desde el retorno de la democracia. En las PASO de agosto, había acudido a votar el 77,66% del padrón.