Por Roberto Delgado
16 Octubre 2019
Allanamientos en San Cayetano ARCHIVO LA GACETA
Luz verde
Megaoperativos para visibilizar la inseguridad que inunda san cayetano
El viernes a la madrugada se llevaron a cabo 35 allanamientos en San Cayetano, en un megaoperativo con 300 gendarmes (que detuvieron a cuatro personas con pocas cantidades de droga) y agentes provinciales a las órdenes de la Fiscalía de Robos y Hurtos II en busca de ladrones de celulares, investigación a partir de un arrebato ocurrido en Pedro Miguel Aráoz y Brígido Terán. Este gigantesco operativo sigue una tendencia de policías y fiscales desde fines del año pasado de insertar de golpe muchos agentes y vehículos en barrios conflictivos con la idea de “pacificarlos” y de atrapar delincuentes y secuestrar elementos robados o droga. Según los funcionarios, es positivo y permite poner el foco de atención en esos barrios.
Luz amarilla
No se están atacando las causas de la violencia y los episodios se repiten
El barrio San Cayetano se ha convertido este año en un triste escenario de la violencia. En una nota del 11 de septiembre, un vecino desilusionado de la policía y la justicia dice que sólo pretende ir a trabajar sin que le peguen un tiro. En otra nota del 5 de octubre, los lavadores de autos de la zona de la avenida Papa Francisco (donde fue asesinado el taxista Carrera) afirman que ahí asaltan todos los días, hasta a quienes van a hacer lavar sus vehículos. Se trata de un sector que está creciendo mucho y depende de la comisaría 4a, que tiene cinco agentes por guardia, más ocho del 911 en cuatro motos y dos camionetas) para atender una población de unas 40.000 personas. Junto a esta área están otras atravesadas por los problemas: La Costanera, San Andrés. Villa Amalia y Los Aguirre, entre otras.
Luz roja
La respuesta policial es ineficaz frente al abandono del estado en la zona
La efectividad de los megaoperativos está en discusión. Si bien hay vecinos que los aplauden, mientras piden presencia policial “todos los días”, otros reclaman que les violan sus derechos con la intrusión en las casas. “Por dos o tres que venden (droga), pagamos todos”, dijo uno. Por otra parte, el accidente del domingo en la autopista de Circunvalación, frente al Mercofrut, muestra el problema general del área este, que supera la insuficiente respuesta policial. Esta vez volcó un ómnibus al cruzarse en medio de la noche un transeúnte: murieron tres personas y resultaron lesionadas 40. Allí, hace tres años, un auto conducido por una persona ebria se cruzó y causó la muerte de tres militantes de derechos humanos. Hay 100 cruces clandestinos en esa ruta de alta velocidad, que siempre está a oscuras y con ingreso constante de carros, motos, bicicletas y animales.
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