Cuando llueve en el cerro, en La Madrid abren el paraguas

LUZ VERDE
Se visibilizó el problema

Con la tremenda inundación del 3 de abril de 2017 La Madrid quedó devastada. 5.800 personas evacuadas que estuvieron a la intemperie durante varios días, pérdidas totales. Es que La Madrid está ubicada en el punto más bajo de la provincia y hacia allí confuyen las aguas. Está muy cerca del dique Frontal. Aunque la población siempre sufrió las crecientes, esta vez se combinaron lluvias extraordinarias en la zona de Catamarca con inexistencia de sistemas de alerta, saturación del embalse de Escaba. La deforestación y el cambio de canalización de aguas que hicieron los agricultores deterninaron que el río San Francisco, que antes era manso, se convirtiera en un torrente que sobresaturó al río Marapa, que es el que inundó La Madrid. El drama de 2017 dio lugar a un estudio profundo realizado por una comisión de emergencia en la que participaron técnicos y funcionarios políticos de la Provincia, la Nación y gente de la Universidad. Esa comisión ha terminado su tarea y la presentará en estos días.

LUZ AMARILLA
Sólo se hicieron defensas y limpieza de ríos

En abril de este año La Madrid se volvió a inundar aunque los afectados fueron 40 personas y pudieron salvar sus pertenencias. Ya se está montando un sistema de alerta por el que colocaron medidores de lluvia y de nivel de agua que avisan de cambios a una central instalada en la comisaría de La Madrid, donde está preparada una sirena para advertir a los vecinos. Según contó el delegado comunal, Dardo Herrera, se han realizado defensas y limpieza del río y se esperan las licitaciones para hacer tareas de más envergadura tanto en el río Marapa como en el paraje Los Sauces, donde desemboca el San Francisco. Además se espera hacer obras de defensa y ensanche del dío en la zona urbana. El trabajo de la Comisión de Emergencia incluye un plan de sistematización de los ríos Marapa y San Francisco, acuerdo con Catamarca para llevarlo a cabo y un acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo, que aportará fondos por U$S 15 millones. Eso está a la firma de los gobernadores de Tucumán y Catamarca.

Luz roja
La máquina de la burocracia

La destrucción que ha sufrido la ruta 334, que une Taco Ralo con La Cocha (al suroeste de La Madrid), muestra el panorama “terrorífico y lamentable”, al decir de la delegada de Taco Ralo, Claudia Ferrari, que tienen los habitantes de 22 localidades, en las que hay tres escuelas que quedan aisladas cada vez que llueve. El interventor de Vialidad, Ricardo Abad, dice que es imposible hacer obras hasta que no se solucione el problema de las aguas. “La sequía nos ayuda”, dice el delegado de La Madrid, Dardo Herrera, con respecto a los trabajos. Pero la “maquinaria infernal de la burocracia” ha demorado los proyectos, opina el ingeniero Eduardo Martel, de la Comisión de Emergencia. Hay dos tareas sustanciales para hacer: sistematizar y reponer los humedales que apaciguaban la escorrentía de las aguas de los cerros. Eso llevará unos 10 años, explica el ingeniero Claudio Bravo. Otra es cambiar la cultura de los productores, que además de desmontar canalizan las aguas y aplican la ley del gallinero: el que está arriba le desvía el agua hacia el que está más abajo.