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Estados Unidos llegó al Mundial de China con un récord espectacular: 13 años sin perder cuando puso en cancha solo equipos con jugadores NBA. Y en la cita china, estiró a 58 el número de victorias consecutivas.
Pero en poco más de 24 horas, esa marca histórica se derrumbó. Ayer cayó contra Francia (79-89), resultado que lo dejó afuera de la lucha por medallas y hoy Serbia le dio otra bofetada, venciéndolo por 94-89 y mandándalo a dirimir el séptimo puesto del torneo con Polonia, que fue superada por República Checa 94-84.
Cualquiera fuese el resultado´ante los polacos, el team USA rubrica el peor mundial de su historia.
Lo que parecía iba a ser la final anticipada de la competencia, se simplificó por un duelo entre dos selecciones que luchaban por los lugares 5-8.
Los serbios ganaron por escándalo el primer cuarto (32-7) con Bogdan Bogdanovic (28) inspirado al máximo y comandando el tiroteo permietral de su escuadra, que acertó un 48,6% (15 en total),
Los de Popovich respondieron en el segundo parcial (12-33) y el partido adquirió desde entonces un tono de mayor paridad. Con Jokic jugando más profundo en la pintura, se sostuvo Serbia arriba.
Derrick White restringió un poco la influencia goleadora de Bogdanovic y Harrison Barnes (22 puntos, 5 asistencias, 4 rebotes) no se daba por vencido para sostener a su equipo.
Middlethon (16) y Kemba (18) se sumaron a la causa, pero no le alcanzó a un Dream Team de lo más flojo que se haya visto en Mundiales.
