Juan Pablo Juárez: “corran por más vida”

Juan Pablo Juárez: “corran por más vida”

“Un cuerpo en movimiento está mejor preparado para hacerle frente a las adversidades”, reflexiona el atleta trasplantado, y su historia así lo demuestra.

SOBREVIVIENTE. Juárez superó la leucemia y, años después, un violento asalto. Siempre se aferró al deporte. SOBREVIVIENTE. Juárez superó la leucemia y, años después, un violento asalto. Siempre se aferró al deporte.

En el cañaveral hay, siempre, un ruido de hombre. Viene alguien, pero es el viento. Y otra vez viene alguien, y es un pájaro. Uno podría pensar que las cañas guardan los sonidos de los hombres que han estado entre ellas. Si fuese así, quizá todavía suenen ahí los pasos de Juan Pablo Juárez, cuando andaba por los surcos. Siete kilómetros separan su casa natal, en Simoca, del ingenio en el que trabajaba su padre. A diario, corría ida y vuelta esa distancia junto a sus nueve hermanos. “Corro desde los seis años: había que trabajar en la caña de azúcar”, dice hoy, a sus 59, para explicar porqué no concibe la vida sin correr. Ha sido ganador dos veces de la maratón de Buenos Aires (1989 y 1996). Y es dueño de registros que lo han situado como un top ten histórico nacional en 10.000 metros, media maratón y maratón.

Un día, entrado en su juventud, el director de deportes del pueblo lo convocó a una competencia en un pago vecino. Ese fue el principio de su historia como atleta. Correr es el don que Dios me ha dado. Todas las personas tienen un don. El mío es correr. Y he sido el mejor. Hubo un tiempo en el que nadie podía pararme. A los 37 años, hacía 20 kilómetros en 59 minutos”, recuerda. Su Dios también le ha dado fe y fortaleza. A mediados de la década del ´90, cuando se preparaba para ser parte de los Juegos Olímpicos de Sídney, le diagnosticaron leucemia. “La vida es así. Cuando te toca, te toca. Hay cosas que uno no maneja. Ahí aprendí a vivir el momento, porque no sabía si habría un mañana”, reflexiona.

En 2015, otra vez la vida lo puso a prueba. Fue asaltado por unos delincuentes que lo golpearon hasta dejarlo inconsciente. Apareció tirado en el Parque 9 de Julio, el mismo donde tantas veces se había entrenado. Al principio, los médicos no sabían si iba a sobrevivir. Luego, pensaron que quedaría parapléjico. Salió adelante: ahora, se encuentra en Inglaterra, a punto de correr en los Juegos Mundiales para Trasplantados. “Hoy, corro como puedo. Jamás, me detengo. Tengo un pie plano y el otro con las falanges de los dedos vencidas. Pero estoy vivo. A mis amigos siempre les digo: corran; corran por más vida”.

- ¿Correr toda la vida rejuvenece?

- Correr de forma habitual nos permite movernos más fácilmente. Y eso repercute en nuestra calidad de vida. Si mantenemos nuestro cuerpo en movimiento, siempre estaremos bien; estaremos sanos. Es importante que nos movamos, para que funcionen todas nuestras células, órganos y tejidos. El cuerpo es la máquina más perfecta que existe. Pero sino se la usa, se deteriora. Un cuerpo en movimiento está mejor preparado para hacerle frente a las adversidades.

- ¿Hacer deporte es antidepresivo?

- Está clínicamente comprobado que el ejercicio es efectivo para tratar la depresión. Cuando uno corre, elimina todas las sustancias tóxicas, de su organismo, y los pensamientos negativos, de su cabeza. El ejercicio nos causa una sensación de bienestar y eleva nuestra confianza. Además, nos produce un efecto de relajación.

- ¿Qué consejo le daría a todos aquellos que no pueden pasar una semana sin salir a correr?

- No hay que exigirse demasiado. Cada vez a más personas, les gusta correr. Pero muchas de ellas se someten a desafíos que dañan su cuerpo. Para que puedan seguir corriendo después de los 50 años, tienen que cuidarse antes. El cuerpo es como una tarjeta de crédito: si gastamos de más, pagaremos las consecuencias. No debemos abusar.

- ¿El running sirve para rendir mejor en el trabajo y en otros aspectos?

- Uno piensa mejor, cuando termina de correr. El ejercicio cansa nuestro cuerpo y alivia nuestras mentes. Eso hace que nos concentremos más y que reacciones mejor, ante determinadas situaciones. Además, reduce los días de enfermedades.

- ¿Cómo comprar unas zapatillas para correr?

- Ahora vienen muchas zapatillas especiales. Todas son buenas. Lo importante es buscar el calzado adecuado, para cada uno. No cualquiera puede correr con una zapatillas livianas, por ejemplo. Para cada tipo de entrenamiento (suave, medio o fuerte), se recomienda un calzado distinto. Y sino saben qué comprar, al menos procuren que sea cómodo y que tenga buena sujeción.

La charla llega a su fin porque el avión que debe depositarlo en Inglaterra está a punto de despegar. “Correr es sentirse vivo. Es el deporte más grande y más simple que existe, a la vez”, finaliza.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios