16 Agosto 2019
La Sala I de la Cámara Penal de esta capital incorporó a un nuevo integrante: Diego Lammoglia (foto). El camarista, que viene del ejercicio libre de la profesión, y se sumará al cuerpo que componen Pedro Roldán Vázquez y María Elisa Molina, juró el miércoles ante la Corte Suprema de Justicia de Tucumán. “La independencia es innegociable y voy a pelear por eso. Me resulta impensable que pueda haber un juez que no sea independiente”, opinó luego de la ceremonia en el Palacio de Justicia. Lammoglia dijo que estaba al borde de las lágrimas. “Siempre quise ejercer la magistratura. Yo no vine aquí por la plata, sino por la vocación de impartir justicia en los juicios orales”, comentó mientras se retiraban los familiares; amigos; colegas de la cátedra de la Universidad Nacional de Tucumán; jueces; profesionales y funcionarios que asistieron al juramento. El camarista añadió que a él le parecía correcto que la ciudadanía sepa cuánto ganan sus magistrados y, en definitiva, cuánto cuesta la justicia que recibe y paga. “Sé que trabajaré en un sistema judicial colapsado y que la sociedad tiene sus reclamos, muchas veces por conflictos que los Tribunales no pueden resolver”, expresó Lammoglia, cuya afición por las historietas lo llevó a crear, junto al dibujante Frido Núñez, un cómic protagonizado por una heroína que restablece el orden justo en Tafí Viejo con la ayuda del perro Chanfain, de una espada y de una balanza.
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