“No queremos escenarios de huelga en la universidad”

“No queremos escenarios de huelga en la universidad”

El rector de la UNT abrió la agenda de un año colmado de desafíos.

PLANES Y COMPROMISOS. El rector García, junto a su escritorio y durante la charla con LA GACETA. la gaceta / fotos de Ines Quinteros Orio PLANES Y COMPROMISOS. El rector García, junto a su escritorio y durante la charla con LA GACETA. la gaceta / fotos de Ines Quinteros Orio

“Es la primera vez en mucho tiempo que la UNT comienza el año con déficit cero”, destaca José García, ya subido a la ola de un año universitario colmado de desafíos. Tórrido, el mediodía castiga a los tucumanos mientras el rector de la UNT recorre en su despacho los principales temas. El compromiso de “agenda abierta” se respeta durante la charla con LA GACETA y las respuestas van configurando el escenario que viene.

- ¿Los números son una preocupación para ustedes, como sucede cada año?

- En 2017 teníamos un déficit de 1,5 sobre el presupuesto, equivalente a la pérdida del salario de todo un mes más el aguinaldo. Hoy el presupuesto otorgado a la UNT es de $ 5.700 millones y la mayor parte está puesta en sueldos para docentes y no docentes. El financiamiento de 2019 está asegurado.

- ¿Va a alcanzar ese dinero?

- Llegar al déficit cero es un gran logro porque significa que hemos podido ordenar la UNT sin haber disminuido ni un cargo docente, ni haber cesanteado personal no docente. Hoy los nombramientos de personal pasan estrictamente por la cuestión presupuestaria, viendo si hay o no hay fondos. Otro ítem es empezar a ver en qué gastamos. Ese ejercicio es muy difícil porque requiere dinamismo, en un país donde la cuestión económica está muy movida. Con la previsión de hoy podés equivocarte mañana. En eso estamos. Es una universidad con más de 100 carreras de grado, más de 100 carreras de posgrado, 70.000 estudiantes... Algo hacemos bien.

- La cuestión es que hay muchas partes que siempre reclaman respuestas.

- Muchas veces en la universidad se generan cosas sin respaldo presupuestario, yo no lo voy a hacer. Las Facultades piden puntos, todas quieren carreras nuevas, pero antes les pido que analicen y vean cómo distribuyen lo que tienen. La UNT se pasó años peleando por carreras y al final el presupuesto docente y no docente creció tanto que se comió la posibilidad de inversión. Hay 255.500 metros cuadrados que tengo que mantener. Se me llueve por todos lados, se me caen paredes por todos lados, entonces tengo que hacer un proyecto de reordenamiento presupuestario y en la parte edilicia seguir haciendo gestión. Trato de ser franco, no es fácil la tarea. No soy Dios, creo en Dios, pero quiero encaminar esta universidad.

- Hay sectores gremiales en los que ya se habla de medidas de fuerza, ¿Cómo analizan la situación?

- La cuestión no es fácil. Tenemos en la UNT dos sectores gremiales, uno es el no docente que acuerda rápidamente en las paritarias. Pero con los docentes es otra historia. En este momento la Secretaría de Políticas Universitarias se junta con cinco gremios, pero entre ellos no está la Conadu Histórica, porque no firmó las paritarias 2018. Hasta diciembre los docentes habían recibido un 25% de aumento. Frente al escenario de una inflación 2018 del 47% o 48% el desfasaje es muy importante. El tema es que tenemos docentes full time, con cinco categorías, tenemos otros con semidedicación y otros con dedicación simple, más un régimen de antigüedad que puede llegar hasta un 120% de acuerdo con los años transcurridos. ¿Cómo está la situación en este momento? Se ha otorgado un 5% pagado en enero, más el 4% que se va a pagar en febrero hacen 9%. Si se suma al 25%, el aumento alcanza el 34%.

- ¿Y entonces?

- No queremos repetir como conductores de la universidad una negociación que se trabe y tengamos escenarios de huelga. Creo que la decisión de los gremios de hacer una huelga va en contra de la educación. Hay muchas formas de protestar, pero fundamentalmente tenemos que cuidar la educación pública. Es una obligación. Pensamos que el capital más exquisito que tiene la universidad son los docentes, por eso hay que aprender a cuidarlos. La universidad tiene la obligación de ser una institución reflexiva, que proponga el diálogo y que perjudique menos a los estudiantes.

- Esto muchas veces choca con la realidad del bolsillo. ¿Por dónde está la salida?

- El Ministerio de Educación dice que van a seguir negociando y haciendo ofrecimientos. Sabemos que algunos sectores reciben muy poco. Nadie que es full time puede ganar menos de $ 27.000, si es semi no va a ganar menos de $ 13.000 y si es simple no va a ganar menos de $7.000. En muchos sectores que recién se han iniciado y no tienen antigüedad, 9% es un porcentaje muy bajo. Nosotros queremos defender un salario justo, pero a la vez pedimos que los docentes sean reflexivos y cuiden la educación pública. Tenemos diálogo, tenemos formas, el año pasado hicimos abrazos simbólicos para defender el salario; es decir, hay muchas formas que podemos sumar. El impacto más fuerte de una huelga muchas veces se ve en las escuelas preuniversitarias o experimentales, con la desesperación de los padres de tener a los chicos 60 días sin clases. Eso se ve reflejado en la matrícula. Por eso les pido a los docentes más colaboración.

- ¿Qué va a pasar con la reforma del estatuto? ¿Qué tiempos manejan?

- La comisión redactora pasó lo trabajado hasta el momento al cuerpo de abogados. Tenemos dos ejes que no hemos discutido: órganos de gobierno, que son importantes, y sistema electoral. La Asamblea será convocada para discutirlos. Hay que terminar con el estatuto durante esta gestión, la propuesta es hacerlo este año. Lo que voy a garantizar dentro del estatuto es que mi posibilidad de reelección está agotada. Me comprometo públicamente en ese sentido. Termino con este mandato. Es mi posición personal y una defensa a mi trayectoria.

- Un atraso de la universidad tiene que ver con la evaluación. ¿Cómo trabajan en ese sentido?

- El vicerrector (Sergio Pagani) se está encargando, es un trabajo muy grande. En abril nos vamos a presentar en la Coneau para solicitar la autoevaluación y la evaluación externa de la institución. Esto no se hace desde hace 20 años, esta universidad no se evalúa desde 1998. El plan de desarrollo indica por dónde debemos marchar en la creación de carreras. ¿Qué tenemos como obligación? Aumentar matrículas y resolver el problema de la duración de los estudiantes en las carreras, que no se realizan en el tiempo estipulado. Es un problema de fondo, cuando se hacen cambios en un plan de estudio, en vez de hacerlo por menor tiempo se lo hace con más materias. Mientras el mundo hace carreras más cortas, con salidas laborales rápidas, nosotros hacemos carreras mucho más largas.

- ¿Y usted por dónde apuntaría si de esta clase de cambio se trata?

- No quiero que se generen expectativas por las que después me juzguen. Lo que debemos hacer es ordenarnos, el problema y el desafío que tengo como rector es evitar la confederación de facultades: que la universidad sea una sola.

- Pero, sin hablar de las carreras, ¿a que clase de innovación puede apuntarse?

- Por ejemplo, estamos trabajando fuerte en lo que son las universidades populares, que no son populistas (risas). Hablamos de carreras cortas y con salida laboral. Por ejemplo, habilitar a plomeros o gasistas. El desafío es la parte presupuestaria y en eso queremos trabajar con el Gobierno provincial y con los municipios, porque tenemos capacidades desde las unidades académicas o las escuelas preuniversitarias para dictar oficios. Pero no quiero que se tome que esto es político, a mí me lo tiene que financiar el Gobierno o los municipios porque no tengo presupuesto. Córdoba ya tiene 4.500 egresados de las universidades populares.

- Hay muchas Facultades en las que no se cubren los cargos, ¿por qué?

- Los docentes y los consejos directivos tienen que hacer el ejercicio en cada Facultad, que sabe cuál es el presupuesto con el que cuenta para las carreras que tiene. Las unidades académicas verán como los cubren, es muy diferente en cada una de ellas. También hay que analizar cuáles son las carreras que tienen estudiantes, cuáles no. Estamos tratando de trabajar en una planilla que dice cuántas horas de clase dicta un docente, cuántos alumnos tiene, cuántas clases, porque ¿cuál es el porcentaje que dicta un titular, o cualquiera que sea full time? El docente full time tiene la obligación de investigar; el semi también; el simple, no. Ya existe un modelo que estamos trabajando de la evaluación de la actividad docente y lo vamos a poner en paritarias. Ahora todos los docentes deberán ser evaluados cada cinco años, entonces tenemos que poner cuáles van a ser las pautas de evaluación para que la calidad educativa no disminuya.

- ¿Cómo está la situación de YMAD? (por aparte se consigna la opinión de García respecto del juicio al ex rector Juan Cerisola)

- En YMAD he nombrado al contador Domingo Marchese. ¿Por qué opté por una persona de números en ese esquema? Porque el doctor Grau ya maneja el medio natural. Me junté con la gobernadora de Catamarca y con todos los directivos de YMAD y pudimos conversar. ¿Qué nos interesa? Alumbrera va a hacer el cierre de mina y pretendemos que se respete la infraestructura de la UNT. El otro objetivo es estudiar a fondo Farallón Negro, que es una mina deficitaria. Desde 2014 que la UNT no recibe ningún dividendo, entonces uno es juez y parte de un sistema que no cierra. (Con la colaboración de Hernán Miranda y Augusto Arnone)

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