Quienes debían abordar un avión o aterrizaron esta tarde en Tucumán se encontraron con una desagradable sorpresa: la ruta que comunica al aeropuerto Benjamín Matienzo con la capital estaba cortada. Según fuentes policiales, la solución pudo controlarse y la autopista se encuentra libre para que automovilistas lleguen a destino.
Un grupo de familias que viven en Alderetes, al costado de La Sevillanita, fueron los protagonistas de la protesta. Según explicaron fuentes policiales, se quejaron por el estado en que quedaron sus viviendas tras la tormenta de hoy.
Las fuentes agregaron que -según argumentaron estas personas- cada vez que llueve con fuerza, el agua ingresa a sus casas y ya perdieron varias de sus pertenencias. Por lo tanto, exigían respuestas de las autoridades.