22 Diciembre 2018
COMPETENCIA. Los calendarios nacionales y regionales seguirán acomodándose. la gaceta / foto de DIEGO ARAOZ (archivo)
Por varios motivos, 2019 será un año bastante agitado en materia rugbística. No sólo por tratarse de un año mundialista (el de mayores en Japón y el Juvenil en Rosario) y por la concreta posibilidad de sumar la Currie Cup a la lista de competencias de alto nivel en las que participa Argentina, sino porque habrá varias novedades en las entrañas del rugby nacional como parte de un proceso de reacomodamiento que tendrá un importante impacto en estas tierras.
A causa de la decisión de la UAR de trasladar el Nacional de Clubes hacia la parte final de la temporada y de incorporar los Interregionales (o Torneos del Interior) como antesala, los torneos locales de cada región deberán comenzar y terminar antes. Por caso, el Regional del NOA, que empezará en marzo y deberá consagrar un campeón hasta fines de julio como máximo.
La Secretaría Técnica, órgano de la URT encargado de elaborar medidas e innovaciones en pos de mejorar la competencia, pergeñó una propuesta de calendario en la que la actividad de los mayores se ensambla con la de juveniles e infantiles de tal forma que coinciden las “ventanas” de descanso en los tres niveles. En esas fechas, no habrá rugby para nadie.
El propósito, según comentaron desde la propia Secretaría, es brindarle a jugadores, cuerpos técnicos, árbitros, dirigentes y demás actores del rugby una pausa para desconectarse y planificar actividades personales o familiares. Después de todo, son amateurs.
Pero hay más. El Anual de clubes tucumanos, que había vuelto este año como preliminar del Regional, volverá al cajón de los recuerdos y todo se enfocará en el torneo del NOA, que por cierto cambiará no sólo de época sino también de formato en 2019.
Nuevo formato
La propuesta elaborada por la Secretaría tiene el visto bueno del nuevo Consejo de la URT, aunque todavía debe ser aprobado por la UAR. De acuerdo al nuevo formato, de las 19 fechas actuales se bajará a 16, y la etapa clasificatoria ya no se dividirá en zonas ni en fases. Habrá una sola ronda clasificatoria de 13 fechas, en la que los 14 equipos de Primera (nueve de Tucumán, tres de Salta y dos de Santiago) se medirán todos contra todos a una sola rueda. Al cabo de esa ronda, los mejores seis clasificados avanzarán a los playoffs: los primeros dos pasarán directamente a semifinales y los cuatro siguientes deberán enfrentarse en cuartos de final.
Estos seis equipos, más el mejor clasificado de los que no entraron a los playoffs (es decir, el 7°) tendrán una plaza en los Interregionales A y B, que se jugarán a continuación del Regional, desde principios de agosto. Esos siete asegurarán además su plaza en el Regional 2020, que tendrá un cupo de participantes más reducido, de 10 equipos (ver nota aparte).
Ascenso y Desarrollo
El año que viene será de transición también para los equipos que no son de Primera. Habrá una categoría Ascenso integrada por ocho equipos que se enfrentarán en dos ruedas. Los tres mejores clasificados de este nivel pasarán a competir en un decagonal con los siete equipos que no se clasificaron a los playoffs de Primera para definir cuáles son los tres que se unen a los siete ya clasificados al Regional de Primera 2020.
El Desarrollo, por su parte, estará conformado por siete equipos, que se enfrentarán en dos ruedas durante una primera fase y en una segunda fase se sumarían a los cinco no clasificados del Ascenso para competir por las dos plazas que faltarán para el Ascenso 2020, que será de nueve equipos. Paciencia: suena más complicado de lo que es en realidad.
Juveniles
La competencia de juveniles fue de lo mejor de 2018, por lo que en 2019 habrá un esquema bastante parecido: una pretemporada de marzo a abril, un Anual Iniciación de abril a junio, un Anual Clausura de julio a septiembre y un Regional de septiembre a octubre y una postemporada de noviembre a diciembre.
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