Nueva propuesta para un jazz en expansión

Nueva propuesta para un jazz en expansión

Emilio Díaz, Claudio Barracu y Javier Podazza conforman un trío con un sonido especial.

ALCANCE REGIONAL. El guitarrista Emilio Díaz nació en Jujuy y destaca el crecimiento del jazz en todo el NOA. ALCANCE REGIONAL. El guitarrista Emilio Díaz nació en Jujuy y destaca el crecimiento del jazz en todo el NOA.

DEBUT

• A las 23 en El Galpón Cafe-Restó (Crisóstomo Álvarez 1.598).

El jazz explora nuevas formas de expresarse en una provincia que lo acoge como uno de los géneros de mayor crecimiento de los últimos años. Esta noche debutará en El Galpón Resto-Bar el Organ Jazz Trío, la flamante formación que reúne al jujeño Emilio Díaz en guitarra, al tucumano Javier Podazza en batería y al italiano Claudio Barracu (radicado hace años en la provincia) en órgano Hammond, donde los distintos orígenes devengarán naturalmente en una fusión de los sonidos que cada uno lleva adentro y trae consigo.

“Siempre estoy en búsqueda de músicas y desafíos nuevos y aprendiendo todo el tiempo de músicos. Con Javier nos conocemos hace varios años e incluso grabamos mi primer DVD en 2014 y con el tano Barracu tocamos un par de veces desde 2011, junto a Claudio Giraud, Juan Escalante y otros grandes referentes del jazz tucumano. Reencontrarnos implica traer una propuesta distinta a lo que vengo trabajando con mis composiciones con una sonoridad interesante”, sostiene Díaz en diálogo con LA GACETA.

- En El Galpón impulsaste un ciclo de jazz que concluye con este debut. ¿Cuál es tu balance?

- Arrancamos en agosto luego de haber estado tocando en Río de Janeiro, en un viaje que me cargo de buenas energías. Volví con la idea de lograr un lugar de reunión y de compartir la buena música en un ambiente fraterno. Todos los viernes se dedicaron a la música en vivo, variando en géneros pero siempre con la impronta del jazz y la improvisación, con muchos artistas tucumanos en el escenario. Fueron noches increíbles, se generó un ambiente en el que no existe la competencia; solo importaba el compartir el arte y el talento de cada uno. El público nos acompaño, y me sorprendió el apoyo tanto de mis colegas, como de los dueños del lugar y del público, siendo que lo realice de manera independiente.

- ¿Por qué crece tanto el género en Tucumán?

- Porque hay muchísimo talento en la provincia. Hay una apertura en crecimiento al jazz, que dejó de ser una música ‘vieja o antigua’ como algunos le decían. Es un lenguaje universal que tiene herramientas que se adaptan a la música en general, sin distinción de género. También fue trascendente la movida que se logró con los festivales, y hay que seguir trabajando en mostrar y promocionar a los artistas locales, como en apoyar a todas las propuestas nuevas para que cultiven a la sociedad y enriquezcan a la cultura.

- ¿En qué estilo te sentís más cómodo?

- Trato de tocar con mi forma y estilo propios, respetando lo que me sale. Si bien no soy un jazzero ortodoxo ni tradicional, con lo aprendido y mi gusto por la música voy tratando de sonar lo mejor posible. Tengo más afinidad con lo latino, el latin jazz, la bossa nova, el samba, el funk. Cuando toco standards (hoy habrá algunos, junto a la fusión y al funk) trato de acomodarme al estilo.

- ¿Qué te aportan los sonidos diferentes que buscás?

- Todo suma, todo es música y es lenguaje. Me enriquece en lo musical, en lo estético, en la textura y sobre todo en la experiencia. Hace poco tocamos con Quintino Cinalli y es increíble lo que se generó musicalmente; actuar con este baterista de larga trayectoria y experiencia me volcó a jugar en diferentes géneros, como el folclore. Pero no es algo que sume en mi proyecto actual del Organ. Hago folclore y tango en otras formaciones, sea solista o en trío, hace tres años grabé un DVD de solo guitarra con músicas del cancionero popular argentino y pronto realizaré un concierto centrado en ese repertorio, pero no estará presente esta noche.

- ¿El impacto del jazz en Tucumán se está sintiendo también a nivel regional?

- Hay una gran movida, y cada vez se está abriendo más el abanico de festivales. Los tenemos en Salta, en Santiago del Estero y en Jujuy, donde hace poco se realizó un festival de artes emergentes que contó con la participación del gran Paquito De Rivera, un enorme saxofonista. Cuando me enteré, no podía creer que este gigante de la música internacional haya actuado en Jujuy. Esos hechos te dan la pauta que el norte tiene mucha movida musical y artística. Llegó el momento de apoyar y de tratar de generar nuevos espacios para mostrar y compartir toda la música que se está haciendo.

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