Una “lluvia” de subas golpea el negocio de las verdulerías

Una “lluvia” de subas golpea el negocio de las verdulerías

La papa, el tomate y la cebolla sienten el efecto de la falta de stock para comercializar. El kilo del turbérculo llega hasta los $ 45. En el Mercofrut estiman que hacia el viernes puede comenzar a bajar ese valor.

EN EL MERCADO. Los puesteros reconocen que los consumidores restringen la compra de verduras hasta tanto se regularicen los precios. la gaceta / foto de diego aráoz EN EL MERCADO. Los puesteros reconocen que los consumidores restringen la compra de verduras hasta tanto se regularicen los precios. la gaceta / foto de diego aráoz

-¿Cómo me va a decir que la papa vale $ 40 ahora?

-Señora, no es nuestra culpa. Esta mañana fui al mercado y me encontré con que no había mercadería y lo poco que quedaba estaba caro.

-¿Y qué hago?

-Por unos días, no haga puré de papas; use el coreanito o el zapallo que valen menos.

La conversación se escuchó muy temprano, cuando el verdulero pasó, como lo hace día por medio, por la calle de un barrio. La misma lluvia que le mojaba la lona de la camioneta, le “inundó” de aumentos al negocio. “Con tantos días de lluvias que tuvimos, se esperaba un aumento de precios”, dice Andrés, el verdulero.

Con años de experiencia en el rubro, Héctor Vázquez, un puestero del Mercado del Norte, indicó a LA GACETA que, desde hace algunos años, Tucumán se expuso a este tipo de aumentos estacionales porque las zonas productivas fueron sustituidas por otros cultivos considerados más rentables para los propietarios de los terrenos. “Hoy traen verduras de Orán (Salta) o desde Mendoza y antes las producíamos aquí. Eso implica, por ejemplo, más costos de flete y de transporte”, puntualiza.

Desde el Mercofrut, sus autoridades señalan que las persistentes lluvias no permiten la cosecha de verduras y eso disminuye considerablemente la oferta de la papa. “Para el mercado interno, por ejemplo, al inicio de la semana han ingresado al mercado entre cinco y seis equipos (cada uno con 1.200 bolsas con 20 kilos de papas) cuando en una jornada normal entran 30”, explicó a LA GACETA Juan Carlos Medina, presidente del Mercado Frutihortícola de Tucumán (Mercofrut). En esa zona, la bolsa, que valía entre $ 200 y $ 250 la semana pasada, esta semana arrancó en $ 500. No obstante, algunos comerciantes indicaron que llegaron a pagar hasta $ 700. De allí que, en algunas verdulerías se consiga la papa a entre $ 40 y $ 45 el kilo.

“No hay que perder de vista que Tucumán abastece también a otros mercados, como el de Buenos Aires y el de otros distritos del NOA”, acotó Medina.

Una vez que el período de lluvias cese, los cosecheros requieren de al menos 48 horas antes de sacar los tubérculos. El titular del Mercofrut estimó que hacia el viernes pueden mejorar las condiciones del tiempo y, en los días sucesivos, puede evidenciarse una reducción del precio. Mientras tanto, también se prevén incrementos en el valor del tomate (hasta ayer estaba a $ 600 el cajón de 18 kilos), que llega desde Orán o Tartagal (Salta). Una situación similar puede darse con la cebolla ($ 20 el kilo al público minorista) y la zanahoria, por falta de stock. Medina insistió que nunca antes se había dado un escenario de lluvias intensas como las que se observaron en los últimos días en zonas de producción hortícola.

En el menú

¿Cuánto vale una porción de papas fritas? Al menos hasta este fin de semana, en un restaurante el valor promediaba los 70/80 pesos y llegaba a los 50 pesos si se las consumían en un bar junto con un sandwich. “Es absurdo el precio de la papa. Llevo 30 años en la gastronomía y nunca vi que el valor se triplicara”, confesó Daniel Woscovi, empresario de la actividad. La variación, que según los productores y los comercializadores es estacional, obliga a los propietarios y a los mozos de restaurantes a explicarles a sus clientes qué sucede con la guarnición a base de papa. “No podemos llevar la porción de fritas de $ 50 a $ 100; tampoco un plato de ñoquis de $ 120 a $ 240; debemos agudizar el ingenio y reinventarnos hasta que pase esta situación”, afirmó Woscovi.

La papa es uno de los ingredientes con mayor comercialización en la gastronomía. Los otros son el aceite y la harina que, en lo que va del año, han experimentado incrementos del 85% y del $ 179%, de acuerdo con un relevamiento efectuado por la consultora Focus Market.

De acuerdo con el diagnóstico efectuado por la firma que conduce el experto Damián Di Pace, al comparar la evolución de precios de septiembre respecto de agosto pudo observarse el aceite experimentó una suba del 26,8% y las harinas hasta un 22,9%.

Woskovi, en tanto, puntualizó que, en estos períodos de crisis, es necesario que haya políticas que tiendan a preservar a las distintas actividades. “En el caso puntual de los gastronómicos, no hay negocio que aguante tantos aumentos frente al esfuerzo que se realiza para sostener la fuente laboral”, finalizó.

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