La Zapada lleva el canto tucumano a Jesús María

Hace 15 años, La Zapada debutaba con la zamba “Me muero lejos de tí”, inmortalizada por Los Tucu Tucu hace 40 años, en la que Roberto Ternan escribió: “Lejos la tarde moría/ y yo con tu ausencia moría también./ Cómo no voy a morir sin tu amor/ si se mueren las tardes sin sol”.

El grupo la reflotó el año pasado, corazón en mano, y la cantará esta noche cuando se presente en el Festival de Doma y Folclore de Jesús María, que se televisa a todo el país por la TV Pública.

“Nuestra consigna es levantar muy en alto la bandera de Tucumán. Estamos felices por la convocatoria a esta fiesta, que nos permitirá demostrar el gran nivel artístico que hay en la provincia y que muchas veces no tiene el merecido espacio en los distintos encuentros locales que tenemos”, resalta Pablo Rojas. Sabe que estar en el escenario cordobés no es cualquier cosa, sino que les puede abrir muchas puertas, aparte de los accesos que ya tienen liberados.

La Zapada no tuvo descanso durante 2017, con recorridos por todo el país y dos hitos en su carrera: haber sido invitados para cantar en la emblemática peña salteña de Valderrama y en el festival de Olavarría, donde obtuvieron además el premio Consagración en el certamen Talento Latente, al imponerse entre 60 artistas.

La banda tampoco se propone poner pausa este año. El cantante anticipa que en el primer semestre saldrá su quinto disco (cuarto de estudio, porque uno fue grabado en vivo), Se titula “Ciego de amigos”, al igual que uno de los temas elegidos para esa producción.

“Decidimos que este CD sea de puro y contundente folclore, aunque nuestra carrera nos haya permitido incursionar en otros ritmos. Desde nuestros inicios nos permitimos cantar todo lo que nos gustaba. La agrupación se formó con cuatro cantantes que llegamos a la banda luego de haber recorrido distintos estilos y se mantiene así. Eso nos dio una tremenda apertura al momento de elegir un repertorio, por lo que le hemos cantando al amor, al paisaje y a la denuncia social, sin tener problemas al hacerlo”, resalta Rojas.

También siguen la formación sonora original de batería acústica, bajo eléctrico y guitarras, como acompañamiento del cuarteto vocal. Junto a Rojas cantan Julio El Juri, Juan Pablo Lazarte y Rodrigo Avellaneda, y participan los instrumentistas Rodrigo Torena, Diego Soria y Juan Cajal. El director musical (a cargo de la armonización y de los arreglos) es Carlos Carrizo.

El músico destaca que el grupo toma como referencia una frase de Kurt Cobain: “la música es sinónimo de libertad, de tocar lo que quieras y como quieras, siempre que tenga pasión y que sea el alimento del amor”.

El tiempo transcurrido derivó en cambios estéticos. “Arrancamos bien informales, con jeans y remeras, y eso nos dio una apertura hacia un público muy joven; los años pasaron y decidimos un cambio radical, por lo que nos presentamos ahora con un formato mucho más formal, de gala”, admite.

En lo que no cambiaron fue en las fuentes de inspiración folclórica, que se enlaza en los referentes de las décadas del 70 y del 80. “Nos encanta cómo sonaban los originales Cantores del Alba. También nos influenció Las Voces del Norte, y seguiremos estas líneas aunque actualmente haya una fuerte corriente de composición con nuevos autores”, afirma.