El Mercosur pide un acuerdo “pragmático”

El Mercosur pide un acuerdo “pragmático”

En Mendoza, el Consejo planteó la posibilidad de cerrar a fin de año un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea, mientras se mantiene una relación “proactiva” con la Alianza del Pacífico. También se comenzaron a sentar las bases para un acuerdo comercial con Canadá

VISIÓN POSITIVA. El Consejo del Mercosur destacó el dinamismo del bloque tras un 2016 en el que los conflictos con Venezuela paralizaron los avances. dyn VISIÓN POSITIVA. El Consejo del Mercosur destacó el dinamismo del bloque tras un 2016 en el que los conflictos con Venezuela paralizaron los avances. dyn
21 Julio 2017

MENDOZA.- El Mercado Común del Sur (Mercosur) planteó ayer la posibilidad de cerrar a fines de este año un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea si ambos bloques apelan a la “razonabilidad y el pragmatismo”.

“Avanzamos en las negociaciones con miras a cerrar en diciembre de este año, si hay razonabilidad entre ambos bloques, el acuerdo comercial Mercosur-Unión Europea”, informó el secretario de Relaciones Económicas Internacionales argentino, Horacio Reyser, durante la reunión del Consejo del Mercado Común en la cumbre que se celebra en Mendoza.

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El funcionario subrayó que tras las reuniones de los equipos técnicos, ahora toca resolver los temas más sensibles a nivel ministerial para “llegar a un acuerdo basado en el pragmatismo, y en una razonabilidad que significa que se respeten ciertas asimetrías”, agregó.

Las negociaciones de un tratado de libre comercio entre el Mercosur y la UE comenzaron hace 20 años y tras un extenso período de estancamiento fueron relanzadas en 2016 con un intercambio de ofertas y un acercamiento entre ambas partes. El acuerdo mantiene varios puntos sensibles, como el agrícola, acceso de bienes industriales, servicios, compras públicas y propiedad intelectual.

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Efecto de amortiguación

El Mercosur solicitó aplicar grupos de desgravación de aranceles en el tiempo para que el impacto de su reducción en distintos sectores se realice en un período de 10 a 15 años. “Esto tiene un efecto de amortiguación”, explicó Reyser, que detalló además que hay ciertos sectores que están excluidos porque la oferta del Mercosur abarca el 87% del comercio con la Unión Europea. También se plantearon reservas en temas referidos a la propiedad intelectual.

En tanto, la Unión Europea anticipó que no puede brindar un libre comercio irrestricto para ciertos productos agrícolas, detalló el funcionario argentino, que advirtió que uno de los puntos de mayor discusión son los subsidios en el sector agropecuario. “El Mercosur aceptó que haya cuotas, algunas incluso pueden ser progresivas en el tiempo. Al final del día, si nosotros somos capaces de ponernos de acuerdo en los grandes temas va a haber un acuerdo de libre comercio en diciembre con la Unión Europea, que después habrá que instrumentar”, resumió Reyser.

El plazo para desgravar gradualmente los aranceles tiene que dar tranquilidad, insistió el funcionario argentino, quien sin embargo dijo que si el Mercosur no puede reconvertir en 10 o 15 años algunos sectores existirá “un problema bastante importante”.

Optimismo

Por su parte, el ministro de Hacienda argentino, Nicolás Dujovne, aseguró que el optimismo que reina en el Mercosur se basa en la fuerte vocación política que hay en los dos bloques. “Lo que se están discutiendo son algunos aspectos muy técnicos factibles de ser zanjados: hay buena chance de que para fin de año lleguemos a firmar el acuerdo”, subrayó el funcionario.

En el cierre de su presidencia pro témpore, que hoy traspasará a Brasil en la cumbre de jefes de Estado del bloque también integrado por Paraguay y Uruguay, Argentina destacó el dinamismo que recuperó el bloque tras un 2016 en el que los conflictos con Venezuela paralizaron la toma de decisiones. Venezuela, el quinto socio, fue suspendida a fines de 2016 por el incumplimiento de los requisitos que demanda el estatuto del mercado regional.

“Estamos logrando reinsertar al Mercosur en el escenario internacional luego de años de magros resultados en materia de negociaciones externas. Desarrollamos una intensa agenda de relacionamiento externo, simultáneamente de las agendas intrarregional y extrarregional”, destacó Reyser.

El funcionario argentino subrayó que la participación del Mercosur en el comercio mundial debe aumentar significativamente. “No lo lograremos si no negociamos acuerdos internacionales con decisión y pragmatismo, integrándonos inteligentemente en los flujos mundiales de comercio e inversiones es como vamos a conseguir mayor crecimiento económico, creación de empleo, aumento de la producción nacional y capacidad para competir”, afirmó.

Relación proactiva

La Argentina informó asimismo sobre la “relación proactiva” del Mercosur con la Alianza del Pacífico y los avances conseguidos en negociaciones comerciales con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA por sus siglas en inglés), la India -país con el que aspira a ampliar el acuerdo de preferencias a 2.000 productos-, Corea del Sur, Japón, Singapur, Australia y Nueva Zelandia.

A la vez, se comenzaron a sentar las bases de un acuerdo comercial con Canadá y esta semana se firmaría la ampliación del acuerdo de complementación económica con Colombia.

Por otra parte, el Mercosur avanzó en varios puntos claves para su funcionamiento, como la cuestión del mercado interior, la facilitación del mercado intrazona y el desarrollo de acuerdos de inversiones y de compras públicas en el Mercosur.

También se logró eliminar el 73% de las 78 barreras que dificultaban el comercio intrarregional. “Sólo quedan licencias que tenemos algunos países que afectan a ciertos sectores productivos”, puntualizó el secretario de Relaciones Económicas Internacionales.

Financiamiento

Al referirse en particular a Argentina, Reyser sostuvo que el país “puede aspirar a un nivel de 20.000 millones de dólares de financiamiento internacional en la medida que seamos serios y confiables, y eso implica un trabajo serio con la oposición, los privados y toda la población”.

“Podemos ser confiables, podemos respetar las reglas y las normas, y así eliminar cualquier fantasma que pueda haber de que Argentina no es un país serio”, concluyó. (DPA-Télam)

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