Los Reyes son los chicos

Los Reyes son los chicos

¿Quién dijo que pasó de moda el agasajo para Gaspar, Melchor y Baltasar? 20 chicos están preparando las raciones de agua y pasto para alimentar a los camellos, que llegarán esta noche a Tucumán.

 Sofía Rivadeneira (8) Sofía Rivadeneira (8)
05 Enero 2017
Mientras esperan la llegada de los Reyes Magos, 20 chicos tucumanos le contaron a LA GACETA sus expectativas para mañana. Es más, uno de ellos confesó que una vez vio a uno de los Reyes mientras le dejaba los regalos. Hay tradiciones que se mantienen, más allá del tsunami tecnológico y de las profundas modificaciones de los hábitos sociales. Las cartitas con los pedidos y la ilusión por encontrar los regalos junto a los zapatitos sobreviven. Son los propios chicos los que cuentan sus historias.



   
“Con coronita”
Lara Biza (7) no llegó a ver a los Magos pero los describe como “señores con coronita”. Ella es una de las tantas fanáticas de “Soy Luna” que pidió una mochila y una cartuchera de la serie de Disney para equiparse para la escuela.


 


Fanático de Buzz

Salvador González (6) deja de prestar atención a su panchuque por un momento para responder que él quiere una nave espacial “como la de Buzz Lightyear”. “Es que todos los días ve la película de Toy Story”, sostiene Analía, su mamá.





Ella los vio
Sofía Rivadeneira (8) se atribuye la felicidad de haber cumplido uno de los sueños de todo niño: ella vio a los Reyes Magos. “Me voy a dormir temprano para despertarme cuando llegan. Un año escuché un ruido y cuando abrí los ojos le vi la espalda a uno que tenía una túnica marrón y como un vestido rojo”, relató Sofía, ante la mirada sorprendida de los empleados de una revistería de Maipú primera cuadra. La privilegiada les pidió a los Reyes una bicicleta y una funda de “Buhitos”.



 


Rumbo a Santiago

Los Reyes hacen parada en Santiago del Estero para visitar a Luisina Zelaya (9), que pidió un monopatín tijera y patines de “Soy Luna”. “Desde los 6 años escribo yo la carta”, dice orgullosa la santiagueña. Nancy, su mamá, cuenta entre risas que los gatos se toman el agua y desparraman el pasto que dejan preparado para los camellos.





Agua y una zanahoria

Con su burbujero recién comprado en la mano, Brisa Arias (5) confiesa que le encanta “Soy Luna” y que, como ya tiene los rollers, ahora pedirá el casco y “las cositas para las rodillas” de su ídola. Brisa explicó que su mamá va a escribir la carta y que ella se encarga de poner agua y una zanahoria para que se alimenten los camellos.





Más allá de internet
Mientras termina de comer su hamburguesa sentado afuera de un local de la peatonal Muñecas, Galo Díaz Rodríguez (9) se muestra indeciso sobre su pedido para este año. Le gustarían unos zapatillas con luces LED o algún juguete de Pokemon pero, según su búsqueda, “en internet hay pero acá en Tucumán no...”


 


Noche de decisiones

Esta noche, Benjamín Beltrán (9) va a escribir su carta. Él quiere la Play Station 4, pero ¿que pasaría si a los Reyes Magos se les agota el stock? Podría ser un auto o un helicóptero a control remoto. “Alguno de carreras”, especifica Benjamín.





Bien comunicado

Bautista Díaz (5) sonríe en silencio abrazado a la pierna de su papá, mirando la vidriera de una juguetería de 24 de Septiembre al 600. “Quiero la radio de la policía”, responde mientras señala un walkie talkie de “Cars” y se prepara para posar para la cámara.





Muy seguro
Augusto Gallucci lleva en brazos a Maximiliano. En la cartita que Maxi les envió a los Reyes el pedido está claro: una remera y muñequitos.





¡Un colectivo!

De la mano de mamá, Nadia Méndez, Santino Rivas afirma sin dudarlo: “sí, creo en los Reyes Magos”. ¿Y qué les pidió? “Quiero un colectivo de juguete”, informó.


 
Doble pedido
Víctor Ruiz es papá de un niño y una niña: Salvador y Constanza. Ambos saben que Melchor, Gaspar y Baltasar son reales. Salvador les pidió unos rollers y Constanza, una muñeca.




Pequeña Pony

“Todavía no escribí la carta porque no estoy muy segura”, cuenta Valentina Fernández Ballesteros (7) con su panchuque en la mano. Para Valentina, una opción es la Pequeña Pony blanca con pelo morado, porque ese es su color favorito.





¿Se viene la pile?

Luz María Abregú (4) se olvidó de avisarles pero está muy segura de que los Reyes ya conocen cuál es su pedido. “Quiero una pileta chiquita para mí y para Bauti, mi hermano”, dijo Luz, mientras lucía su gorra de Hello Kitty.


Madrugadores

El sol quema en el centro tucumano. María Paula Agüero espera en un banco junto con sus hijos, Tiago y Tiziano. Ellos se levantarán bien temprano mañana, ilusionados con que los Reyes les hayan dejado autitos de juguete.


Justo a tiempo
Benjamín Santiesteban estaba dubitativo pero volvió corriendo: “¡ya me acordé, quiero unas antiparras del Hombre Araña”, destacó. A su mamá, Giselle, le estalló la sonrisa.


Tímida, pero segura
Soledad Barrionuevo llevaba al centro a su hija, Ludmila Visuares. Escondida tras la cintura de su mamá, Ludmila reveló que espera unos patines de “Soy Luna” y una bicicleta. Confía totalmente en los Reyes.


Se comieron todo

Florencia y Carlos son hermanos y acompañan a su mamá por el centro. ¿Qué pasó el año pasado? “Me levanté y no estaban ni el pasto y el agua”, dijo Carlos. Este año esperan que los Reyes les dejen una bicicleta y una cama inflable.

Temas Reyes Magos
Tamaño texto
Comentarios
Comentarios